El presidente de Senegal, Macky Sall, dijo el jueves que todavía tiene la esperanza de que se pueda llegar a un compromiso con la junta militar gobernante de Malí sobre el cronograma para restaurar el gobierno democrático.
Los líderes militares de Malí, que derrocaron al gobierno en 2020, han estado negociando con el bloque regional de África occidental cuánto tiempo pueden permanecer en el poder.
Anunciaron esta semana que habían decidido 24 meses a partir de marzo de 2022.
La Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (ECOWAS, por sus siglas en inglés) dijo que lamentaba la decisión de Malí de publicar un cronograma durante las negociaciones.
ECOWAS ha impuesto sanciones paralizantes a Malí desde principios de este año, y un acuerdo sobre la transición allanaría el camino para que se levanten.
“Obviamente fue torpe de su parte publicar (la cronología), pero fue producto de un acuerdo con el mediador”, dijo Sall en una entrevista con las emisoras francesas RFI y France 24.
“Veremos de aquí a julio si se dan las condiciones para que la CEDEAO levante las sanciones”, dijo, y explicó que los jefes de Estado regionales habían pedido más detalles sobre la propuesta.
La próxima cumbre de ECOWAS está programada para el 3 de julio.
Sall, quien también es presidente de la Unión Africana, se reunió la semana pasada con el presidente ruso, Vladimir Putin, para tratar de liberar las exportaciones de granos y fertilizantes rusos y ucranianos que han sido bloqueadas debido a la invasión rusa de Ucrania, lo que provocó una crisis alimentaria en África.
Sall dijo el jueves que no tenía motivos para dudar de Putin, quien le había dicho que Rusia estaba lista para permitir las exportaciones de granos de Ucrania si se desminaba la costa.
Rusia ha dicho anteriormente que está lista para permitir que los barcos que transportan alimentos salgan de Ucrania a cambio del levantamiento de algunas sanciones occidentales, una propuesta que Ucrania ha descrito como “chantaje”.