El lunes, Abdoulaye Bathilyquien también es el Representante Especial del Secretario General, instó al gobierno a asignar los recursos apropiados, intensificar los esfuerzos políticos para poner fin al estancamiento y restablecer la legitimidad de las instituciones libias a través de elecciones.
‘Espíritu de unidad’
Desde el derrocamiento en 2011 del exgobernante Muammar Gadaffi, la rica en petróleo Libia ha caído en múltiples crisis que han dividido al país entre administraciones rivales: un Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA) reconocido por la ONU con sede en la capital, Trípoli, y el de la propia -estilo Ejército Nacional Libio (LNA), dirigido por el general Khalifa Haftar.
El Sr. Bathily, quien presidió las reuniones de dos días, elogió al JMC (representantes militares de bandos opuestos, llamados 5+5) por su “determinación y compromiso con la paz y la estabilidad en Libia y su unidad e integridad”.
Y llamó a los líderes políticos “a mostrar el mismo espíritu de unidad y abnegación que sus hermanos uniformados de la Comisión Militar Mixta para superar la crisis actual”.
‘Instrumento de esperanza’
El alto funcionario de la ONU reiteró el apoyo de la ONU al JMC y a las instituciones libias relevantes en sus esfuerzos por reunificar las instituciones militares y de seguridad y retirar a los mercenarios, lo cual está de acuerdo con el plan de acción para preservar la integridad territorial de Libia.
Además, hizo hincapié en la necesidad de identificar formas de involucrar a los países vecinos para poner fin a la presencia de estas fuerzas en suelo libio y pidió a la comunidad internacional que apoye el 5+5 JMC como “un instrumento de esperanza para todos los libios”.
Entre otros asuntos discutidos en la reunión, el JMC habló sobre la participación de grupos armados con el objetivo de crear un entorno propicio para la paz y la seguridad sostenibles en Libia.
A la sesión de clausura asistió un equipo visitante de la Sede de la ONU encargado de evaluar cómo UNSMIL está implementando las recomendaciones formuladas por un Revisión estratégica independiente realizado el año pasado.
El examen tenía por objeto mejorar el desempeño de la Misión en las tareas que se le encomendaron para satisfacer mejor las expectativas del pueblo y las instituciones libias en cuanto a la paz y la estabilidad.