Miles de personas salieron a las calles en un puñado de países de mayoría musulmana el viernes para expresar su indignación por la profanación de una copia del Corán en Suecia, un día después de que los manifestantes irrumpieran en la embajada del país en Irak.
Miles de personas salieron a las calles en un puñado de países de mayoría musulmana el viernes para expresar su indignación por la profanación de una copia del Corán en Suecia, un día después de que los manifestantes irrumpieran en la embajada del país en Irak.
Las protestas en Irak, Líbano e Irán que siguieron a las oraciones semanales fueron controladas y pacíficas, en contraste con las escenas en Bagdad el jueves, cuando los manifestantes ocuparon el recinto de la embajada sueca durante varias horas y provocaron un pequeño incendio.
El personal de la embajada había sido evacuado antes del asalto y la agencia de noticias sueca TT informó que fueron reubicados en Estocolmo por razones de seguridad.
Para los musulmanes, cualquier profanación del Corán, su texto sagrado, es abominable.