ESTAMBUL (AP) — El presidente de Turquía ordenó que se tomen medidas contra los medios, como los programas de televisión, que se consideren contrarios a los “valores fundamentales” de Turquía.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en una circular publicada el sábado en el Boletín Oficial, dijo que la decisión tiene como objetivo eliminar los efectos nocivos de los programas de televisión con contenido extranjero que han sido adaptados en Turquía y proteger la cultura turca.
Se tomarán todas las precauciones contra las producciones que afecten negativamente a la familia, los niños y los jóvenes, a través de las leyes y la constitución turcas. Los niños y jóvenes estarán protegidos de «mensajes transmitidos a través de ciertos símbolos», indicó la decisión, sin dar más detalles.
El organismo de control de los medios de comunicación de Turquía, el Consejo Supremo de Radio y Televisión, ya tiene amplios poderes y puede multar a los medios u ordenar apagones temporales para los canales de televisión que en su mayoría son críticos con el gobierno por violar los valores turcos. También ha multado a canales por contenido erótico o LGBT.
Ilhan Tasci, miembro del organismo de control de medios del principal partido de la oposición, calificó la medida como “la circular de censura” y dijo que viola la constitución que promete proteger la libertad de prensa.
La mayoría de las empresas de medios en Turquía ya son propiedad de empresas cercanas al gobierno conservador y nacionalista y siguen de cerca las líneas gubernamentales.
Reporteros sin Fronteras clasifica a Turquía en el puesto 153 de 180 países en su Índice Mundial de Libertad de Prensa de 2021. Al menos 34 empleados de los medios están actualmente tras las rejas, según el Sindicato de Periodistas de Turquía.
La semana pasada, el conocido periodista Sedef Kabas fue arrestado pendiente de juicio por insultar a Erdogan, luego de citar un proverbio en la televisión Tele 1 y las redes sociales que hace referencia a un buey. Decenas de miles de personas en Turquía han sido procesadas por supuestamente insultar a Erdogan.
La circular sigue al lanzamiento de la adaptación turca de Fox TV del programa internacional “The Masked Singer”, donde las celebridades actúan disfrazadas para ocultar sus identidades. El programa ha sido criticado en línea por supuesto contenido satánico y pagano.
En otras partes de la región, la primera película árabe de Netflix ha desatado un intenso debate en Egipto y otros países de Medio Oriente, con críticos que la denuncian como una amenaza a la familia y los valores religiosos que fomentan la homosexualidad.
Otros se han unido en defensa de la película. Dicen que los detractores niegan lo que sucede a puertas cerradas en la vida real y dicen que aquellos a quienes no les gusta la película «No Dearer Friends» simplemente no pueden suscribirse a Netflix.