Stefanos Tsitsipas llegó a una cuarta semifinal del Abierto de Australia el martes y un enfrentamiento con Karen Khachanov mientras se concentra en su primer título de Grand Slam.
El tercer cabeza de serie griego demostró ser demasiado poderoso para el checo no cabeza de serie Jiri Lehecka en el Rod Laver Arena, arrasando a casa por 6-3, 7-6 (7/2), 6-4.
Se enfrentará al decimoctavo sembrado ruso Khachanov por un lugar en su primera final en Melbourne Park, después de haberse estrellado en las semifinales tres veces anteriormente, incluso en los últimos dos años.
Khachanov de Rusia reservó su lugar cuando el estadounidense Sebastian Korda se retiró con una lesión en la muñeca mientras perdía 7-6 (7/5), 6-3, 3-0.
«Esta vez me sentí diferente a cualquier otro partido y lo más importante al final es que encontré una solución», dijo Tsitsipas, quien se convertirá en el número uno del mundo si gana el título.
Novak Djokovic también puede lograr la hazaña si hace lo mismo.
«Fue un partido de tres sets muy difícil, uno de los más difíciles hasta ahora en la competencia», agregó Tsitsipas, de 24 años.
«Jiri tuvo un muy buen torneo, comenzó a jugar muy bien recientemente. Es un gran jugador.
«Tuve que lidiar con sus golpes de fondo, que pasaban por encima de la red mucho más pesados y profundos, así que esa fue una tarea en la que realmente tuve que poner mi corazón y dar lo mejor de mí», agregó.
Lehecka, en el puesto 71, advirtió a Tsitsipas antes del partido que quería vengarse después de perder ante él en las semifinales de Róterdam el año pasado.
Pero el joven de 21 años, que derrotó al 11° sembrado Cameron Norrie y al sexto sembrado Felix Auger-Aliassime en el camino a los cuartos de final, estuvo inmediatamente bajo presión.
Tsitsipas trabajó cinco puntos de quiebre en su primer juego de servicio y superó la línea cuando el checo lanzó una volea de revés desviada.
Se consolidó para una ventaja de 3-0 y con su fuerte primer servicio que le ofreció a Lehecka pocas oportunidades de devolver el golpe, llegó al primer set en 36 minutos, sellándolo con un ace.
Tsitsipas salvó cinco puntos de quiebre para aguantar en un tercer juego crucial del segundo set cuando Lehecka cobró vida y comenzó a aplicar presión.
Ambos jugadores se atrincheraron y se fue con servicio a un desempate, donde el griego mantuvo la calma para tomar una ventaja temprana que nunca abandonó.
En un cerrado tercer set, la segunda doble falta de Tsitsipas de la noche le dio a Lehecka tres puntos de quiebre en el séptimo juego.
Pero los salvó a todos para sostener, bombeando el aire en celebración.
Con el bocado entre los dientes, la estrella griega aumentó la presión cuando Lehecka sirvió para mantenerse en la contienda y un revés cruzado le valió un punto de partido que convirtió.
MP/PST