DAKAR, Senegal (TAE)-En un giro extraordinario de los acontecimientos, Senegal se ha visto envuelto en celebraciones tras los resultados provisionales de las elecciones presidenciales, que muestran al candidato de la oposición Bassirou Diomaye Faye tomando una ventaja significativa. Los resultados han provocado un júbilo generalizado entre sus partidarios, ya que la principal figura de la oposición parece preparada para cantar la victoria en una carrera ferozmente disputada.
Bassirou Diomaye Faye, miembro del partido Pastef de 44 años y estrechamente asociado con el líder del partido, Ousmane Sonko, se ha convertido en el favorito para ganar, eclipsando al candidato del partido gobernante, Amadou Ba. Este acontecimiento se produce después de un período tumultuoso marcado por tres años de protestas de la oposición y disidencia pública contra el presidente en ejercicio, Macky Sall. A pesar de la enérgica contienda de 19 candidatos, fue Faye quien cautivó la imaginación del electorado.
Los recuentos iniciales, retransmitidos en directo, revelaron la considerable ventaja de Faye, lo que provocó celebraciones espontáneas en todo Dakar, la capital. Partidarios entusiastas salieron a las calles, lanzaron fuegos artificiales, ondearon la bandera nacional y hicieron resonar en el aire los sonidos de vuvuzelas, simbolizando un cambio político significativo en la nación de África Occidental.
Sin embargo, Amadou Ba, representante de la coalición gobernante y ex primer ministro, ha cuestionado estos primeros indicios de derrota. Ba cree firmemente que será necesaria una segunda ronda de votación para decidir de manera concluyente la presidencia, rechazando así la idea de una derrota absoluta en la primera ronda.
La elección, que contó con la participación de millones de personas en una votación pacífica, no estuvo exenta de controversias. La candidatura de Faye, respaldada por el influyente Ousmane Sonko, a quien se le prohibió postularse debido a problemas legales, ha sido un punto central de esta elección. Su alianza, que hizo campaña bajo el lema «Diomaye es Sonko», destacó un frente de oposición unificado que atrajo a un amplio sector de votantes senegaleses, desilusionados con la actual administración.
En un movimiento sin precedentes, cinco de los oponentes de Faye concedieron la carrera, lo que indica aún más su probable victoria. Entre ellos, Anta Babacar Ngom, una figura notable en la carrera, expresó sus mejores deseos a Faye, reconociendo su liderazgo como la elección del pueblo.
Las elecciones, inicialmente previstas para el mes pasado, fueron pospuestas por el presidente Sall, lo que provocó protestas violentas y una protesta nacional. Este retraso, junto con la reciente ley de amnistía que facilitó la liberación de Faye y Sonko, preparó el escenario para una elección que no sólo puso a prueba la resiliencia democrática de Senegal sino que también mostró el anhelo de cambio del electorado.
Mientras el país espera los resultados provisionales finales, previstos para el martes, la anticipación es palpable, y muchos esperan una transición pacífica del poder. Esta elección marca un momento significativo en el panorama político de Senegal, con el potencial de redefinir su trayectoria futura.