El Tribunal Superior de Pretoria escuchó el martes un caso presentado por el Centro de Derecho Infantil, representado por la Sección 27, contra SACE por lo que califican de sanciones «sorprendentemente indulgentes» impuestas a dos maestros de escuela primaria que se declararon culpables de usar castigos corporales en el salón de clases.
JOHANNESBURGO – El Consejo Sudafricano de Educadores (SACE) dijo que no llamó a dos niños a declarar contra los maestros que se declararon culpables de haberlos agredido, porque no quería someterlos a un trauma secundario.
El Tribunal Superior de Pretoria escuchó el martes un caso presentado por el Centro de Derecho Infantil, representado por la Sección 27, contra SACE por lo que calificaron de sanciones «sorprendentemente indulgentes» impuestas contra dos maestros de escuela primaria.
Se declararon culpables de recurrir al castigo corporal en el aula.
Entre los temas planteados está lo que la organización dijo que era una falta de participación significativa en el proceso por parte de los niños.
El abogado representante legal de SACE, Matthews Mojapelo, tomó la palabra el martes por la tarde y argumentó con vehemencia que su defendido -al igual que todas las partes involucradas- estaba comprometido con la protección de los derechos de los niños.
Sostuvo que la decisión de no llamar al estrado a los niños involucrados en estos asuntos durante el proceso disciplinario fue razonable.
Mojapelo argumentó que a los docentes se les impusieron las máximas sanciones posibles en su momento y que la declaración de los niños no habría hecho ninguna diferencia, en todo caso, pidió al tribunal que considerara la posibilidad de una victimización secundaria.
Argumentó además que remitir los asuntos a SACE ahora, que es lo que ahora quiere el Centro de Derecho del Niño, y hacer que los niños testifiquen, tampoco estaría justificado.
Sin embargo, el abogado del Center for Child Law respondió que había varias formas diferentes a través de las cuales los niños podrían haber escuchado sus voces además de dar testimonio en el banquillo de los testigos.
‘NO HAY SUFICIENTES MEDIDAS DE REHABILITACIÓN EN SU LUGAR’
El Instituto de Niños de la Universidad de Ciudad del Cabo dijo que no había medidas adecuadas para rehabilitar a los maestros que fueron declarados culpables de usar castigos corporales en el aula.
Las organizaciones quieren que se ordene a SACE que reconsidere las sanciones que se impusieron en estas materias específicas, así como su política de sanciones obligatorias.
El Instituto del Niño ha sido admitido como amicus curiae, o amigo de la corte, en el caso y su posición es que si se ordena a SACE revisar su política de sanciones obligatorias, esta debería incorporar la adición de opciones correccionales y de rehabilitación.
La abogada del instituto, Nasreen Rajab-Budlender, destacó un caso en el que un niño de siete años fue golpeado en la cabeza con un tubo de PVC, y la maestra explicó que no sabía qué le había pasado.
Y su castigo, enfatizó Rajab-Budlender, no había incluido ningún entrenamiento sobre cómo lidiar mejor con situaciones como esta.
Señaló las estadísticas de 2013 que indicaban que más de la mitad de todos los escolares sudafricanos habían sufrido castigos corporales, a pesar de que fue prohibido en los años 90, argumentando que es responsabilidad de SACE proporcionar desarrollo profesional en el campo.