MOSCÚ: Moscú denunció el martes (2 de agosto) una posible visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán como una provocación, expresando su total solidaridad con el aliado China.
«Lo que está relacionado con esta gira y una posible visita a Taiwán es una pura provocación», dijo a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Dijo que la potencial visita estaba provocando un «aumento de la tensión» en la región y acusó a Washington de elegir «el camino de la confrontación».
«Queremos enfatizar una vez más que somos absolutamente solidarios con China, su actitud hacia el problema es comprensible y absolutamente justificada».
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, también acusó a Estados Unidos de ser provocador por la posible visita.
“Washington está trayendo desestabilización al mundo. Ni un solo conflicto resuelto en las últimas décadas, pero sí muchos provocados”, dijo en las redes sociales.
Enfrentada a sanciones sin precedentes y al aislamiento internacional por su campaña militar en la Ucrania prooccidental, Rusia ha buscado lazos más estrechos con China y ha expresado su solidaridad con Beijing sobre Taiwán.
China considera a Taiwán su territorio y ha indicado a través de repetidas advertencias que vería una visita de Pelosi como una gran provocación.
Los funcionarios estadounidenses a menudo hacen visitas discretas a Taiwán para mostrar su apoyo, pero Pelosi, que actualmente se encuentra de gira por varios países asiáticos, sería una visitante de mayor perfil que cualquier otra en la historia reciente.
El Taiwán democrático vive bajo la constante amenaza de ser incautado por China.
El asalto de Moscú a Ucrania ha aumentado los temores de que Beijing pueda cumplir de manera similar con las amenazas de anexar a su vecino mucho más pequeño y superado en armas.