Después del empate 1-1 contra Porto y la controversia del árbitro planteada por Claudio Ranieri, Roma ha decidido tomar una posición contra el arbitraje del árbitro alemán Tobias Stieler.
La propiedad de Giallorossi se ha puesto del lado del entrenador, el equipo y los fanáticos, expresando su decepción con las decisiones disputadas en el partido de la Europa League.
En los próximos días, el club enviará una carta formal de protesta a la UEFA, para resaltar los errores de arbitraje que influyeron en el partido.
El club también está esperando desarrollos con respecto a una posible suspensión de Ranieri por los comentarios realizados en el postal.