La música de Elucid se basa en la observación y se eleva por la imaginación. La conciencia del rapero y productor neoyorquino sobre el mundo precario en el que vivimos y el cuerpo que habita carga sus canciones con la urgencia de los tiempos. Si su último proyecto en solitario, el de 2022 Le dije a Bessiefue un contrapunto más brillante y esperanzador a los oscuros paisajes sonoros y las crudas imágenes de algunos de sus trabajos anteriores. REVELADOR es su sucesor lúcido y de puño cerrado, pero no menos esperanzador. “Aprieto la mano de mis hijos y camino con fuerza contra el viento”, rima en “Bad Pollen”, dándonos una imagen mental de un hombre que persiste a pesar de las circunstancias porque tiene personas por quienes vivir y su futuro por el que luchar.
El tipo de hip-hop indie que hace Elucid es conocido (y a veces difamado por) su palabrería, pero la composición de Elucid aquí se distingue por su economía de palabras, no por su sobreabundancia. Cuando dice: “Mi mes favorito, septiembre/Hago bebés maravillosos, pero ya terminé de hacer N-palabras” en “Ikebana”, puedes escuchar las palabras y sentir a un padre negro rompiendo una maldición. En lugar de bombardear con vocabulario, Elucid se esfuerza por decir algo emocionalmente resonante en la menor cantidad de palabras posible. La composición concisa y frenética de temas como “World Is Dog” y los estribillos como mantras a lo largo del álbum hacen REVELADOR tan accesible como embriagador.
La letra se complementa con un paisaje sonoro de ruido, zumbido ambiental, fallos y distorsión, cortesía del propio artista junto con los productores Jon Nellen, August Fanon, Child Actor, The Lasso, DJ Haram, Samiyam y Saint Abdullah. Todos esos elementos aparentemente dispares se mantienen unidos mediante instrumentación en vivo, es decir, la batería tocada por el colaborador clave Nellen y el bajo dinámico en vivo, cortesía del virtuoso de Irreversible Entanglements, Luke Stewart. En “Slum of a Disregard”, la línea de bajo enseñada por Stewart impulsa la pista y mantiene su ritmo sólo cuando los jadeos dan paso a la voz entrecortada de Elucid que pronuncia las palabras “Mi casero… es un… sionista”.
El barítono de Elucid es la señal en medio del ruido. En el álbum, su voz alterna entre instrumento musical, herramienta y arma. A veces suena como si estuviera leyendo un pergamino o una tablilla de piedra (“CCTV”), otras veces su tono es tan íntimo como los susurros nocturnos entre amantes juntos en la cama (“SKP”).