Imagen de cartel cerca de la frontera portuguesa con España. Crédito: Tevfik Teker/Creative Commons Attribution 3.0
Portugal impondrá controles en los 21 pasos fronterizos que lo conectan con España a partir de este sábado 22 de julio.
Esta acción fue decretada con motivo de Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) 2023 en Lisboa, coincidiendo con la visita del Papa Francisco. La medida se limitará al ‘mínimo estrictamente necesario’ y permanecerá vigente hasta el 7 de agosto.
Los viajeros que intenten ingresar a territorio portugués desde España deberán mostrar un documento de identidad para ingresar al país. El consulado español en Lisboa recomienda que los niños también lleven un documento de identidad o pasaporte en vigor.
Hay 21 puntos fronterizos oficiales
La medida temporal se aplica a los pasos fronterizos ubicados en Valença-Viana do Castelo, Vila Verde da Raia-Chaves, Quintanilha-Braganza, Vilar Formoso-Guarda, Marvão-Portalegre, Caia-Elvas, Vila Verde de Ficalho-Beja, Castro Marim y Monção.
También cubre las de Barrancos, Rio de Onor, Melgaço, Montalegre, Tourém, Vinhais, Ponte da Barca, Vila Nova de Cerveira, Pomarão, Termas de Monfortinho-Castelo Branco, Miranda do Douro y Mourão.
El Sistema de Seguridad Interior de Portugal aseguró en un comunicado que ‘no cerrará las fronteras’, pero señaló que los controles serán ‘selectivos y dirigidos, basados en información y análisis de riesgo’.
Junto con otras fuerzas y servicios de seguridad del Estado, el Servicio de Extranjería y Fronteras será el encargado de implementar la medida, según 20minutos.es.
Los controles se limitarán al ‘mínimo estrictamente necesario’
Según la resolución del Consejo de Ministros, los controles se realizarán según el ‘principio de proporcionalidad’ y se limitarán al ‘mínimo estrictamente necesario para responder a posibles amenazas al orden público y la seguridad interior’.
El gobierno portugués justificó la medida por la ‘dimensión, características y complejidad del evento’. También destacó su ‘visibilidad mediática’, más el ‘enorme flujo de personas esperado’, y el ‘contexto actual de amenaza’.
Se consideró necesario por parte del gobierno impedir ‘el ingreso al territorio nacional de ciudadanos o grupos cuyo comportamiento sea susceptible de comprometer la seguridad de los ciudadanos nacionales y extranjeros que participen en el evento’.
Portugal empleó una práctica similar en 2017
Esta no es la primera vez que Portugal toma una medida de esta magnitud. Una práctica similar se empleó durante la visita del Papa Francisco en 2017, con motivo del centenario de las apariciones de la Virgen en Fátima, según la tradición católica.
La Jornada Mundial de la Juventud se celebrará en Lisboa y sus municipios vecinos entre el 1 y el 6 de agosto y se esperan alrededor de un millón de visitantes.
El Papa Francisco llegará a territorio portugués el miércoles 2, donde permanecerá hasta el 6 de agosto y también visitará Fátima.