El sábado, la abogada estatal Valencia Dube se acercó al Tribunal Superior de Johannesburgo con una solicitud urgente para que se cancelara la fianza de Ackerman ya que ha desaparecido.
Gerhard Ackerman llega al Tribunal Superior de Johannesburgo el 24 de enero de 2023. Se enfrenta a más de 700 cargos de violación, tráfico sexual y pornografía infantil. Imagen: Kgomotso Modise/Eyewitness News
JOHANNESBURGO – El Estado ha presentado una solicitud judicial urgente para que se revoque la fianza de Gerhard Ackerman, el hombre acusado de dirigir una red de explotación sexual infantil.
El jueves se emitió una orden de arresto contra Ackerman cuando no se presentó ante el tribunal para su juicio, alegando problemas de salud.
Sin embargo, el viernes, cuando no entregó al tribunal un certificado de enfermedad y no pudo ser localizado, los investigadores de la policía fueron enviados a su casa donde descubrieron que había vendido todos sus bienes muebles y ya no vivía allí.
El sábado, la abogada estatal Valencia Dube se acercó al Tribunal Superior de Johannesburgo con una solicitud urgente para que se cancelara la fianza de Ackerman, ya que la desaparición del hombre de 52 años contraviene las condiciones de su fianza.
El Tribunal de Primera Instancia de Johannesburgo le concedió una fianza de 6.000 rand en 2021, con la condición de que se presentara a diario en la comisaría más cercana.
A Ackerman tampoco se le permite salir de Gauteng sin el permiso del oficial investigador, y no se le permite estar en posesión de una computadora portátil o un teléfono celular para acceder a Internet.
Enfrenta 740 cargos, que incluyen violación, intento de asesinato, distribución de pornografía infantil y tráfico de personas menores de edad con fines de explotación sexual.
El coacusado de Ackerman en el asunto, el juez interino y abogado de derechos humanos Paul Kennedy, se suicidó el año pasado después de ser acusado.
Los dos supuestamente trabajaron juntos para preparar sexualmente, violar y exponer a niños pequeños a material pornográfico.
El Estado dijo que trabajaría incansablemente para detener a Ackerman y agradeció cualquier ayuda del público para encontrarlo.