«Lo que más quieren los haitianos es la pazque les permitirá regresar a la escuela, cultivar sus campos y acceder a servicios básicos como ir a un hospital”, dijo Edem Wosornu, Director de Operaciones y Promoción de la oficina de asuntos humanitarios de la ONU. OCHAdijo en una declaración conjunta emitido el lunes.
La Sra. Wosornu visitó Haití junto con Lucía Elmi, Directora de Operaciones de Emergencia del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).UNICEF), y Andrea Koulaimah, Directora para América Latina y el Caribe de la Oficina Europea de Protección Civil y Operaciones de Ayuda Humanitaria (ECHO).
Llegan más oficiales kenianos
Mientras continúan los enfrentamientos en Haití, más de 578.000 personas están desplazadas y casi cinco millones –aproximadamente la mitad de la población– se enfrentan a una hambruna aguda, y 1,6 millones corren el riesgo de morir de inanición.
El pasado mes de octubre, la ONU Consejo de Seguridad autorizó el despliegue de una misión de Apoyo de Seguridad Multinacional (MSS) para ayudar a la asediada fuerza policial nacional a sofocar la violencia de las pandillas.
Kenia se ofreció a liderar la misión no perteneciente a la ONU y los medios internacionales informan que otros 200 de sus agentes de policía han llegado a Haití, sumándose a los 400 que ya se encuentran allí.
La violencia ha paralizado el sector agrícola de Haití –una fuente clave de ingresos para las familias– y ha interrumpido la educación y la atención sanitaria. Más de 900 escuelas han estado cerradas desde enero, mientras que en la capital, Puerto Príncipe, casi el 40% de todos los centros de salud para pacientes internados están fuera de servicio.
Impacto en las familias
Además, las familias que solían ser económicamente independientes ahora han perdido ingresos, lo que afecta su acceso a alimentos y atención médica. La mayoría de las personas desplazadas no saben si sus hijos podrán regresar a la escuela.
La delegación humanitaria se reunió con altos funcionarios haitianos, incluido el nuevo Primer Ministro Gary Conille, así como con autoridades de las ciudades de Les Cayes y Gonaives.
Subrayaron que la comunidad internacional debe seguir apoyando al Gobierno de Haití proporcionándole ayuda vital y asistencia para el desarrollo.
«Millones de familias anhelan que se ponga fin a esta violencia incesante. Es fundamental reforzar los servicios de protección para mujeres y niños “Apoyar a los desplazados internos –que son los más afectados por esta crisis– y acelerar la asistencia humanitaria para quienes la necesitan”, afirmó la Sra. Elmi.
Déficit de ayuda
En febrero, la ONU y sus socios lanzaron un Plan de Respuesta Humanitaria de 674 millones de dólares para Haití, pero a mediados de año está Menos de una cuarta parte financiada.
El costo de la inacción sería demasiado alto si no se intensifica la respuesta ahora, advirtió la declaración, señalando que los socios humanitarios internacionales y locales han logrado encontrar soluciones para acceder y ayudar a los haitianos en todo el país a pesar de la difícil situación de seguridad.
Al tiempo que subraya la importancia vital de la ayuda humanitaria, la declaración también destaca que los desafíos de Haití “son Basada en años de inversión insuficiente en servicios sociales básicos y que la ayuda humanitaria es una solución temporal que no puede resolver los problemas estructurales y profundamente arraigados del país”.
La respuesta humanitaria debe basarse en la sostenibilidad y servir como “trampolín hacia acciones de recuperación duraderas y sostenibles”, afirmó la Sra. Koulaimah.
“Hacemos un llamamiento a la comunidad internacional para que no desaproveche este impulso único y redoble sus esfuerzos y movilice recursos para abordar las necesidades humanitarias y de desarrollo más urgentes”.