La Policía Nacional acaba de esposar a dos presuntos estafadores que vendieron por 1.200.000 euros una vivienda en Manilva que no era suya.
La finca de Sotogrande, de más de 5.000 metros cuadrados y un valor real estimado de 3,5 millones de euros, fue vendida ante notario de Estepona mediante escrituras falsificadas. Los dos supuestos estafadores se hicieron pasar por administradores de una empresa ficticia que decía ser la propietaria del terreno.
Los propietarios vieron cómo sus propiedades eran vendidas sin que ellos pudieran hacerlo.
La policía fue alertada de las actividades de los dos hombres y comenzó a investigar después de que los propietarios de otra empresa, que también había vendido fraudulentamente sus terrenos, los denunciaran. Posteriormente descubrieron que también se habían vendido ilegalmente varias propiedades en las provincias de Sevilla y Málaga, cuyos verdaderos propietarios nunca tuvieron ni idea de lo que estaba sucediendo hasta que aparecieron nuevos demandantes.
Documentos falsificados permitidos a los estafadores
Según las notas de la investigación, los estafadores se presentaron inicialmente en una notaría de Sevilla con un acuerdo falsificado de la Junta General de la sociedad propietaria, mediante el cual uno de los detenidos se habría convertido en administrador único con facultades para vender la finca. Aproximadamente dos meses después, en una notaría de Estepona, un hombre, al mostrar un documento fraudulento ID, haciéndose pasar por administrador legítimo de la sociedad, vendió el inmueble por un valor cercano a 1.200.000 €.
Pero este robo silencioso y descarado no es exclusivo de España. En el Reino Unido, por ejemplo, se informó de que durante el ejercicio económico 2021/22, el Registro de la Propiedad de Su Majestad pagó la friolera de 5,8 millones de libras esterlinas en indemnizaciones que incluían costas legales y protección a las víctimas de fraude y otros errores de juicio notarial a los propietarios de viviendas que habían sufrido los mismos errores.