Investigación publicada recientemente en Ciencia sugiere que modificar la cantidad de aerosoles antropogénicos liberados a la atmósfera podría haber afectado el comportamiento de los ciclones tropicales globales en los últimos 40 años.
Los aerosoles antropogénicos son partículas sólidas suspendidas o gotas líquidas en el aire, como sulfato, nitrato, carbón negro y carbón orgánico. La quema de combustibles fósiles, los incendios de deforestación y la quema de desechos agrícolas son grandes productores de estos aerosoles.
Murakami y su equipo descubrieron que la disminución de la presencia de estas partículas en el aire debido a las medidas de control de la contaminación en Europa y Estados Unidos ha contribuido a reducir la ocurrencia de ciclones en el hemisferio sur, pero incrementándola en el Atlántico norte.
Además, la creciente contaminación del aire en el sur y el este de Asia, como consecuencia de su crecimiento económico e industrial, generó una gran disminución de los ciclones en el Pacífico norte occidental.
Según el estudio, menos emisiones de sulfato, un componente de los aerosoles antropogénicos, de Europa y Estados Unidos afectan el calentamiento en el hemisferio norte en relación con el sur. Este fenómeno ha llevado a condiciones atmosféricas meridionales anómalas ya una menor generación de ciclones tropicales.
El área del Pacífico Norte occidental se ve afectada por los aerosoles antropogénicos de India y China. Los aerosoles ascendentes podrían enfriar el continente asiático y reducir su contraste térmico con los océanos del Indo-Pacífico. En consecuencia, la vaguada del monzón, que es una de las principales fuentes de ciclones tropicales, se debilitaría en el verano. El resultado es una menor frecuencia y génesis de ciclones.
Estudios tempranos ya han indicado que las emisiones antropogénicas de aerosoles, específicamente de sulfatos, afectan la actividad ciclónica. Sin embargo, estaban enfocados a escala local desde un punto de vista termodinámico. Por ejemplo, explicar la acción decreciente de los ciclones debido a la presencia de aerosoles en los océanos abiertos que inhiben la insolación.
En cambio, Murakami utilizó simulaciones de modelos climáticos utilizando un enfoque dinámico para revelar los impactos de los cambios en las emisiones de aerosoles en los patrones de circulación a gran escala de los ciclones tropicales. Este estudio también indica que una mayor reducción en la generación de aerosoles antropogénicos en Europa y los Estados Unidos conducirá a un desplazamiento hacia los polos de los chorros subtropicales. Esto influirá en la actividad de los ciclones tropicales en el Atlántico Norte.
Los resultados del modelo son consistentes con el comportamiento observado de los ciclones durante los últimos 40 años. Sin embargo, los cambios son diferentes en cada región porque otros factores han estado involucrados en la actividad global de ciclones tropicales. El equipo informó en estudios previos que los gases de efecto invernadero, las erupciones volcánicas y la variabilidad natural multidecadal también podrían estar involucrados en estos cambios.
Los hallazgos confirman las consecuencias de las actividades humanas en el medio ambiente. Además, enfatiza el gran impacto que los futuros controles de las emisiones de aerosoles antropogénicos podrían tener en la actividad ciclónica global.
Referencias
- Murakami, H. (2022). Influencia global sustancial de los aerosoles antropogénicos en los ciclones tropicales durante los últimos 40 años. Avances científicos, 8(19). https://doi.org/10.1126/sciadv.abn9493
- Murakami, H., Delworth, TL, Cooke, WF, Zhao, M., Xiang, B. y Hsu, PC (2020). Cambio climático detectado en la distribución global de ciclones tropicales. Actas de la Academia Nacional de Ciencias, 117(20), 10706–10714. https://doi.org/10.1073/pnas.1922500117
- Dunstone, NJ, Smith, DM, Booth, BBB, Hermanson, L. y Eade, R. (2013). Forzamiento antropogénico de aerosoles de las tormentas tropicales del Atlántico. Nature Geoscience, 6(7), 534–539. https://doi.org/10.1038/ngeo1854