Almería es conocida por el paisaje accidentado detrás de los icónicos westerns de Sergio Leone, pero un pequeño pueblo en Níjar es un lugar de peregrinación para los fanáticos del spaghetti west.
Cuando la mayoría de la gente piensa en localizaciones de spaghetti western, instintivamente piensa en el parque temático Oasys en el corazón del desierto de Tabernas. Allí los visitantes pueden pasear por los decorados cinematográficos construidos por cineastas italianos a principios de los años 60 y disfrutar de un auténtico espectáculo del oeste.
Sin embargo, la omnipresente ciudad encalada, que hizo famosos a actores como Clint Eastwood y Lee Van Cleef, se llama Los Albaricoques y alberga a unas 300 personas.
Historia cinematográfica
Al acercarse al pueblo, la silueta de un vaquero gigante, con una pistola de seis tiros en la mano, anuncia la llegada de los visitantes, con un cartel que dice: «BIENVENIDOS A LOS ALBARICOQUES ES DE CINE», que se traduce aproximadamente como «Bienvenidos a The Apricots, de las películas.'
La ciudad está, con razón, orgullosa de su historia cinematográfica, como lo atestiguan los nombres de las calles, escritos en auténtica fuente occidental. Los visitantes se encontrarán caminando por la Calle Lee Van Cleef, la Calle Clint Eastwood, la Avenida Sergio Leone o la Calle Ennio Morricone, el inspirador compositor italiano detrás de innumerables westerns de los años 60 y 70.
Los Albaricoques ahora se ha modernizado con carreteras asfaltadas y casas nuevas. Sin embargo, los aficionados al spaghetti western aún reconocerán los pocos edificios intactos que aparecieron en películas como Un puñado de dólares (1964) y Por unos cuantos dolares más (1965).
En la segunda película, Los Albaricoques pasó a llamarse 'Agua Caliente' cuando el cazarrecompensas, interpretado por Eastwood, se encuentra en 'problemas' con la banda de bandidos.
Al momento de filmar la segunda de Leone Trilogía de dólares(Lo bueno, lo malo y lo feo siendo el tercero) el director incluso reclutó a algunos lugareños de la zona para hacer de extras en lo que se convertiría en una superproducción que puso a Almería en el mapa como un gran lugar para hacer una película.
En las afueras de la ciudad se encuentra la plaza circular empedrada (que representa una plaza de toros) que sirvió de escenario para el tiroteo final en Por unos cuantos dolares másdonde Van Cleef se venga de 'El Indio' al son de un reloj de bolsillo.
Y cada año Los Albaricoques organiza un evento 'Crazy for Western' interpretado por actores que recrean algunas de las escenas más memorables de las películas.