Un miembro del equipo de tránsito de vacunación fue asesinado en el distrito de Taloqan en la provincia de Takhar, mientras que cuatro miembros de los equipos de casa en casa fueron asesinados en dos incidentes separados en la ciudad de Kunduz, según una declaración del equipo de país de la ONU.
Dos vacunadores y un activista social fueron asesinados en el distrito de Emamsaheb de la provincia de Kunduz.
A raíz de la carnicería, la ONU suspendió inmediatamente la campaña nacional de vacunación contra la poliomielitis en las provincias de Kunduz y Takhar.
Violación del derecho humanitario
Ramiz Alakbarov, Representante Especial Adjunto del Secretario General para Afganistán, usó Twitter para expresar su condena en los términos más enérgicos. Dijo que los ataques y asesinatos eran una violación del derecho internacional humanitario.
El jefe de la Organización Mundial de la Salud (QUIÉN), Tedros Adhanom Ghebreyeus, también ha expresado su profunda conmoción. Cuatro de los trabajadores de la salud eran mujeres, dijo en una publicación en Gorjeo.
“Expresamos nuestras más profundas condolencias a sus familias y colegas”, escribió, y agregó que los trabajadores de la salud no deben ser atacados.
Salud bajo fuego
El equipo de la ONU en el país quedó consternado por la brutalidad de los asesinatos y señaló que esta no era la primera vez que los trabajadores de la salud eran atacados.
El año pasado, nueve trabajadores de la poliomielitis fueron asesinados durante las campañas nacionales de vacunación contra la poliomielitis.
Estos ejercicios de inmunización son una forma vital y efectiva de llegar a millones de niños para protegerlos contra la poliomielitis, dijo la declaración de la ONU, y privarlos de la seguridad de una vida saludable es inhumano.
“Esta violencia sin sentido debe cesar de inmediato, y los responsables deben ser investigados y llevados ante la justicia. Estos ataques son una violación del derecho internacional humanitario”.
La ONU condena enérgicamente todos los ataques contra los trabajadores de la salud en cualquier lugar y destaca que la prestación de atención médica es imparcial.
Los niños son los que más sufren
La campaña de vacunación contra la poliomielitis en Afganistán cuenta con el apoyo de la OMS, junto con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y otros socios.
Planearon apuntar a casi 10 millones de menores de cinco años en todo el país este mes, con cuatro rondas más programadas para el resto del año.
Dr. Ahmed Al-Mandhari, Director Regional de la OMS para el Mediterráneo Oriental, dijo la suspensión del programa en las provincias de Kunduz y Takhar deja a miles de niños desprotegidos y expuestos a una enfermedad potencialmente mortal que puede provocar una parálisis permanente.
Al pedir el fin de los «ataques sin sentido» contra los trabajadores de la salud, el Dr. Al-Mandhari señaló que están estrictamente prohibidos en todas las religiones.
“Estos actos cobardes en última instancia solo dañan a niños inocentes a quienes se les debe dar todas las oportunidades para vivir una vida segura y saludable”. él dijo.
“La OMS condena todos los ataques contra los trabajadores de la salud en los términos más enérgicos y hace un llamamiento a las autoridades talibanes para que identifiquen de inmediato a los perpetradores y los lleven ante la justicia”.