UNMAS emitido una declaración diciendo que estaba «profundamente entristecido y profundamente alarmado» por la muerte de 27 civiles, incluidos 22 niñosen un “incidente trágico” que involucró artefactos explosivos sin detonar (UXO) que ocurrió el viernes en la región de Lower Shabelle.
Cincuenta y tres personas también resultaron heridas.
Vidas inocentes perdidas
“UNMAS expresa sus más sinceras condolencias a las familias afectadas por este devastador evento y comparte su pena y dolor durante este momento increíblemente difícil”, dijo Justin Smith, jefe de la agencia en Somalia.
“La pérdida de vidas inocentes, especialmente de niños, es una tragedia inmensa que subraya la necesidad urgente de redoblar los esfuerzos para hacer frente a los peligros que plantean los artefactos explosivos en Somalia”, agregó.
UNMAS se estableció en 1997 y su trabajo va más allá de la remoción de minas terrestres del suelo en países afectados por conflictos armados.
‘Un claro recordatorio’
Las acciones también abordan el problema de las UXO, que son armas como bombas, morteros, granadas y misiles que no llegaron a detonar. En muchos países representan una amenaza aún mayor para la seguridad que las minas terrestres, según su sitio web.
UNMAS dijo que el incidente en el Bajo Shabelle sirve como un claro recordatorio de la amenaza constante a la que se enfrentan los civiles, en particular los niñosen áreas afectadas por conflictos, y destaca la importancia crítica de acción rápida y decisiva mitigar los riesgos asociados a los restos explosivos de guerra.
La ONU, a través de UNMAS y sus socios, ha renovado su compromiso de trabajar con el Gobierno de Somalia, las organizaciones internacionales y las partes interesadas relevantes para fortalecer los esfuerzos de acción contra las minas.
Intensificar los esfuerzos colectivos
“Juntos, debemos intensificar nuestros esfuerzos colectivos para eliminar los riesgos que plantean los artefactos explosivos y salvaguardar la vida de las personas vulnerables, en particular los niños”, dijo el Sr. Smith.
Desde 1991, la ONU se ha comprometido a promover la paz y la seguridad en Somalia, donde las fuerzas de mantenimiento de la paz de la Unión Africana apoyan a las fuerzas nacionales en su batalla en curso contra los militantes de Al-Shabaab.
El viernes pasado también se produjo un ataque mortal contra un hotel en la capital, Mogadiscio, que dejó 16 muertos, entre ellos un miembro del personal de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Condenamos todos los ataques contra civiles inocentes y trabajadores de ayuda humanitaria y expresamos nuestro más sentido pésame a los familiares de todos los que murieron en este ataque”, dijo Malik Mamunur, representante de la OMS en Somalia.