Los hombres fueron condenados a “que les cortaran completamente cuatro dedos de la mano derecha, de modo que solo les quedaran las palmas de las manos y los pulgares”.
ACNUDH es profundamente preocupado que las amputaciones son inminentes.
Guillotina ya instalada
De los ocho prisioneros, siete fueron identificados como Hadi Rostami, Mehdi Sharafian, Mehdi Shahivand, Amir Shirmard, Morteza Jalili, Ebrahim Rafiei, Yaghoub y Fazeli Koushki.
Siete están actualmente recluidos en la Prisión Central del Gran Teherán, y se desconoce el paradero del Sr. Rostami después de que fuera trasladado de la prisión el 12 de junio.
“Es probable que todos ellos sean trasladados a la prisión de Evin de Teherán, donde los informes indican recientemente se instaló una guillotina para cortar los dedos y, según los informes, se usó el 31 de mayo amputarle los dedos a otro preso”, dijo la Sra. Shamdasani.
El primer intento de transferir a los hombres tuvo lugar el 11 de junio, pero se detuvo debido a la resistencia de los compañeros de prisión, agregó.
Poner fin al castigo corporal
Las organizaciones de la sociedad civil iraní informan que al menos 237 personas, en su mayoría de los segmentos más pobres de la sociedad, fueron sentenciadas a amputaciones entre el 1 de enero de 2000 y el 24 de septiembre de 2020.
Se han ejecutado sentencias en al menos 129 casos.
“También hacemos un llamado a Irán para que revisar urgentemente sus sanciones penales para eliminar cualquier forma de castigo corporalincluidas amputaciones, flagelaciones y lapidaciones, de conformidad con sus obligaciones en virtud del derecho internacional de los derechos humanos y de acuerdo con las recomendaciones de los mecanismos de derechos humanos de la ONU”, dijo la Sra. Shamdasani.
Recordó que el país es parte del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticosque prohíbe la tortura u otras penas crueles, inhumanas o degradantes.