Argel, Argelia. En una revelación sorprendente, Omar bin Omran, desaparecido durante la tumultuosa guerra civil argelina en la década de 1990, ha sido descubierto con vida, encarcelado en el sótano de la casa de su vecino, a sólo 200 metros de donde creció.
Ahora con 45 años, la milagrosa historia de supervivencia del Sr. Bin Omran surge después de su desaparición cuando era un adolescente en Djelfa, Argelia.
Las autoridades locales arrestaron a un hombre de 61 años sospechoso de haberlo mantenido cautivo durante más de dos décadas.
Esta detención se produjo tras un aviso recibido por la fiscalía, que dio lugar a una intensa investigación por parte de la gendarmería nacional. El sospechoso intentó huir cuando llegaron los agentes, pero fue rápidamente detenido.
Durante años, la familia de Bin Omran temió que hubiera sido una de las 200.000 personas asesinadas o 20.000 secuestradas durante el conflicto civil entre el gobierno de Argelia y los grupos islamistas.
La verdad, sin embargo, estaba mucho más cerca de casa.
El Sr. Bin Omran fue encontrado escondido debajo de un montón de heno en un redil de ovejas, donde lo habían mantenido fuera de la vista y sin poder comunicarse con el mundo exterior.
Tras el descubrimiento, los funcionarios describieron la escena donde se encontró al Sr. Bin Omran la noche del 12 de mayo. Dijo a los rescatistas que, aunque a veces veía a su familia desde su confinamiento, no podía pedir ayuda debido a un «hechizo» que supuestamente le había lanzado su captor, una afirmación que pone de relieve el tormento psicológico que soportó.
El Ministerio de Justicia ha declarado que la investigación está en curso y que el Sr. Bin Omran actualmente recibe atención médica y psicológica para ayudarle en su recuperación. Un portavoz del ministerio ha descrito la naturaleza del crimen como «atroz», subrayando la gravedad del abuso y el impacto en la comunidad.
Este impactante caso no sólo subraya las tragedias personales que pueden desarrollarse durante períodos de malestar nacional, sino también la profunda resiliencia del espíritu humano. La terrible experiencia de Bin Omran ha cautivado a la nación y ha sacado a la luz las cicatrices ocultas de la guerra civil de Argelia, que siguen afectando a sus ciudadanos décadas después.
Su historia es una de supervivencia contra adversidades abrumadoras y un recordatorio conmovedor de los legados no resueltos del conflicto.