Jabón de Mounjaro para bajar de peso. Crédito: Shutterstock, Cynthia A Jackson.
El gobierno del Reino Unido está explorando una nueva iniciativa para ayudar a las personas desempleadas a regresar a la fuerza laboral ofreciendo inyecciones para bajar de peso.
Esta propuesta, respaldada por el Secretario de Salud Wes Streeting, tiene como objetivo abordar las crecientes tasas de obesidad y las altas cifras de desempleo del país, con beneficios potenciales para el NHS y la economía en general. El plan sugiere que al abordar los desafíos de salud asociados con la obesidad, las personas pueden estar mejor equipadas para encontrar empleo, aliviando la presión sobre los servicios públicos e impulsando la productividad económica.
La estrategia del gobierno para ayudar a los desempleados a perder peso
Las medidas para bajar de peso que se están considerando incluyen medicamentos como la tirzepatida, conocida comercialmente como Mounjaro. Estos medicamentos ya han mostrado resultados prometedores en ensayos clínicos para tratar tanto la diabetes tipo 2 como la obesidad. Otro golpe para bajar de peso que se está considerando es Ozempic, que recientemente ha aparecido en los titulares y ha ganado popularidad en el mundo de las celebridades.
Como informó The Telegraph, Wes Streeting afirmó: “Nuestros cinturones cada vez más anchos también están imponiendo una carga significativa a nuestro servicio de salud, costando al NHS £11 mil millones al año, incluso más que fumar. Y está frenando nuestra economía. Las enfermedades causadas por la obesidad hacen que las personas se tomen cuatro días más de enfermedad al año en promedio, mientras que muchos otros se ven obligados a dejar el trabajo por completo”. Streeting argumentó que al ofrecer estas inyecciones a personas desempleadas, el gobierno podría mejorar la salud pública y al mismo tiempo reducir la presión financiera sobre el NHS.
La propuesta de Streeting, aunque todavía en sus primeras etapas, se considera una forma de abordar dos cuestiones críticas a la vez: ayudar a las personas a perder peso y al mismo tiempo mejorar sus perspectivas de reingresar al mercado laboral.
A principios de este mes, el Instituto Nacional para la Excelencia en la Salud y la Atención anunció que se iniciaría una consulta en respuesta a una solicitud del NHS de Inglaterra sobre cómo se puede utilizar Mounjaro como medicamento para bajar de peso en el NHS.
Según The Telegraph, se reclutarán hasta 3.000 pacientes obesos para una investigación de cinco años de duración para ver si el medicamento mejora la productividad y hace que más personas vuelvan a trabajar.
El costo y el uso del NHS de inyecciones/medicamentos para bajar de peso
Se estima que las inyecciones para bajar de peso cuestan entre £ 600 y £ 1000 (entre 690 y 1150 euros) por persona y por año, según una investigación de mercado general.
Algunos medicamentos como la semaglutida (también llamada Wegovy) han sido aprobados para su uso en el NHS en casos particulares, principalmente para personas con diabetes tipo 2. Wegovy es un tratamiento a largo plazo y el precio por año de forma privada suele rondar las 3.500 libras esterlinas (4.194 euros).
Medicamentos e inyecciones para bajar de peso en la Unión Europea
La obesidad sigue aumentando en toda Europa, pero no todos los países están abiertos a la idea de medicamentos o inyecciones para bajar de peso. Francia se negó recientemente a respaldar la prescripción del medicamento para bajar de peso Wegovy a través de su sistema de seguro nacional, a pesar de estar a la venta.
La intersección de las políticas sanitarias y económicas podría crear un efecto dominó, y otras naciones de la UE podrían adoptar estrategias similares si la iniciativa del Reino Unido tiene éxito. Para los expatriados que viajan con frecuencia o tienen conexiones familiares entre el Reino Unido y Europa, es importante estar atentos a las innovaciones sanitarias.
Los desafíos que se avecinan para los esfuerzos por perder peso
Si bien el plan es prometedor, quedan importantes desafíos por delante. En primer lugar, está la cuestión de la financiación. Como se señaló, el costo de las vacunas puede ser elevado y su aplicación a una población más amplia requeriría recursos gubernamentales sustanciales. Además, el éxito del programa dependerá de si las inyecciones para bajar de peso por sí solas son suficientes para ayudar a las personas a recuperar su confianza y empleabilidad. El NHS también necesitará equilibrar esta iniciativa con otras áreas críticas de atención, gestionando posibles preocupaciones sobre la asignación de recursos.