Esta es la tasa más alta de necesidad de salud mental jamás registrada en todo el sistema médico de UNRWA.
Los programas de salud de UNRWA brindan apoyo a unos dos millones de refugiados palestinos en Jordania, Líbano, el territorio palestino ocupado compuesto por Cisjordania, incluidos Jerusalén Este y Gaza, así como en Siria.
Año inmensamente desafiante
Hablando con los periodistas en Ginebra, el Dr. Akihiro Seita, Director de Salud de UNRWA, destacó los “enormes desafíos” enfrentados por los programas de salud de la agencia en el último año: además de la COVID-19 pandemia, enumeró el devastador brote de cólera en Siria y el Líbano, la turbulencia regional y la actual crisis de financiación de la UNRWA.
Hizo hincapié en que los centros de salud de UNRWA en Gaza y Cisjordania ocupada continúan brindando atención médica vital en medio de las hostilidades.
Ocho millones vistos
El año pasado, la agencia de la ONU logró brindar alrededor de ocho millones de consultas médicas.
Eso incluye alrededor 300.000 personas que viven con diabetes e hipertensión o enfermedades no transmisibles y también 90.000 madres embarazadas”, dijo el Dr. Seita.
De los 5,9 millones de refugiados palestinos registrados, se estima que 3,2 millones están registrados en los centros de la UNRWA y reciben servicios de salud gratuitos. El número de consultas aumentó en un 12,4 por ciento en comparación con 2021.
En 2022, los programas de salud de UNRWA combatieron con éxito un resurgimiento del cólera en los campos de refugiados en el Líbano, además de la cepa altamente infecciosa Omicron de COVID-19.
Además, los centros de salud de UNRWA en Gaza y Cisjordania ocupada brindaron atención médica vital en medio de las hostilidades en curso.
Ataques aéreos, la violencia continúa
“La semana pasada, tuvimos un conflicto armado en Gaza, pero aún así los 22 centros de salud permanecieron abiertos y brindaron un servicio de atención primaria de salud fundamental y el cincuenta por ciento del personal siguió asistiendo”, enfatizó el Dr. Seita.
Actualmente, se estima que 3,2 millones o el 53,9 por ciento de los refugiados palestinos todavía dependen en gran medida de los servicios de UNRWA debido a las dificultades económicas, las altas tasas de desempleo y el empeoramiento de los niveles de pobreza, especialmente en las zonas de conflicto.
Alrededor de un tercio de los refugiados palestinos registrados residen en 58 campos de refugiados oficiales, conviviendo con las comunidades de los países de acogida.
Aumento de la violencia de género
UNRWA administra 240 centros de salud con más de 3,000 empleados que brindan una amplia gama de atención médica primaria.
“La violencia de género también va en aumento. Esa es nuestra principal preocupación y preocupación”, dijo el Dr. Seita. “Al mismo tiempo, los niños sufren no solo mentalmente, sino también físicamente”.
La salud mental es otra de las prioridades sanitarias de UNRWA. Según el Dr. Seita, los pacientes en Gaza tienen la tasa de detección más alta con un 26,4 por ciento. En 2021, alrededor de 15.000 personas necesitaron apoyo psicosocial.
Durante el lapso de siete décadas de desplazamientoel número de refugiados palestinos ha aumentado de 750.000 en 1950 a 5,9 millones en 2022.