Los australianos están recurriendo cada vez más al apoyo para personas sin hogar a medida que el costo de vida y las crisis de vivienda golpean con fuerza.
Casi 100.000 australianos experimentaron tales dificultades financieras en 2022 que necesitaron buscar apoyo especializado para personas sin hogar, un aumento del 9,2 por ciento.
Los habitantes de Tasmania sufrieron el mayor aumento, donde hubo un aumento del 18,9 % de personas que buscaban ayuda, seguidos por Australia Occidental con un 15,4 % y Australia Meridional con un 12,9 %.
NSW, que representa más de una cuarta parte de las personas que necesitan ayuda, experimentó un aumento del 10,4 por ciento.
El alquiler semanal promedio de Australia ahora es de $520 para casas y $460 para unidades, saltando a $640 para una casa en Sydney después de un aumento de precios del 12,3 por ciento en el último año, según PropTrack.
La directora ejecutiva de Homelessness Australia, Kate Colvin, advirtió que se necesita atención urgente.
“Cuando el número de australianos que buscan apoyo para personas sin hogar debido a problemas financieros y de vivienda aumenta a dos dígitos, la alarma debería sonar con fuerza”, dijo la Sra. Colvin.
“Australia tiene un desempleo bajo récord y, gracias a los precios de las materias primas, algunas de las finanzas públicas más sanas del mundo. Podemos hacer más para ayudar a las personas que se han quedado atrás”.
Se estima que 116,427 personas estaban sin hogar en la noche del censo en 2016.
Las estadísticas impactantes se producen cuando las tasas de vacantes de alquiler caen en Australia, con la tasa nacional en el 1 por ciento, según una investigación de SQM.
La tasa de vacantes de Adelaida alcanzó el 0,5 por ciento, mientras que Perth alcanzó el 0,4 por ciento.
Hobart está sentado en 0,6 por ciento, mientras que Sydney está más alto en 1,6 por ciento.
La Sra. Colvin instó al gobierno a hacer más para apoyar a las personas sin hogar.
“Las iniciativas recientes del Commonwealth para ampliar las viviendas sociales y asequibles son muy bienvenidas, pero la escala de este problema se está expandiendo, no disminuyendo”, dice ella.
“Como sociedad, nuestra resolución de año nuevo debe ser tomarnos en serio el estrés de la vivienda y la falta de vivienda.
“Todos los australianos merecen un hogar estable y seguro. Esto debería ser un derecho, no un privilegio”.