El gobierno del Reino Unido ha anunciado medidas innovadoras para combatir los daños relacionados con el juego, centrándose en los juegos de tragamonedas en línea con nuevos límites estrictos de apuestas y un mayor apoyo a las personas afectadas.
Restricciones de juego: proteger a los jugadores vulnerables
Según las reglas propuestas, las apuestas en tragamonedas en línea tendrán un límite de £5 por giro para los jugadores de 25 años o más, mientras que se aplicará un límite más estricto de £2 por giro a los jugadores más jóvenes de entre 18 y 24 años. Estos límites tienen como objetivo reducir los riesgos asociados. con pérdidas excesivas y sesiones prolongadas de juego, que a menudo están relacionadas con la adicción.
Fiona Twycross, Ministra de Juegos de Azar, destacó la urgencia de estas medidas y afirmó: “Los daños causados por el juego pueden arruinar las finanzas, las relaciones y, en última instancia, la vida de las personas. Estamos absolutamente comprometidos a implementar medidas reforzadas para quienes están en riesgo”.
Por qué las tragamonedas en línea están en el punto de mira
- Las tragamonedas son conocidas por su juego a alta velocidad y sus grandes pérdidas potenciales.
- Las largas sesiones de juego y los juegos compulsivos son comunes entre los jugadores problemáticos.
- Los adultos jóvenes, en particular los de entre 18 y 24 años, son considerados particularmente vulnerables a los daños del juego.
Nuevo impuesto al juego para financiar tratamientos e investigaciones
El gobierno también está introduciendo un impuesto legal a los operadores de juegos de azar, que se espera recaude £100 millones anualmente. Los fondos de este impuesto apoyarán:
- Servicios de tratamiento para personas afectadas por la adicción al juego.
- Campañas de salud pública para concienciar.
- Proyectos de investigación para comprender mejor y mitigar los daños del juego.
Henrietta Bowden-Jones, asesora clínica nacional sobre los daños del juego en el NHS, destacó el impacto generalizado y señaló que el 2,5% de la población del Reino Unido juega de manera perjudicial, y muchos más se ven afectados indirectamente.
¿Un paso adelante o una oportunidad perdida?
Si bien las nuevas medidas marcan un progreso significativo, los críticos argumentan que se podría hacer más para abordar de manera integral los daños al juego. Los líderes de la industria también han expresado su preocupación por el impacto en los ingresos, particularmente para los operadores más pequeños.
El plan del gobierno del Reino Unido refleja un compromiso creciente para abordar frontalmente los daños relacionados con el juego, equilibrando la supervisión regulatoria con la protección del jugador. Sin embargo, quedan dudas sobre la eficacia con la que se aplicarán estas medidas y si generarán cambios significativos para quienes corren mayor riesgo.
Con la industria del juego bajo un escrutinio cada vez mayor, este podría ser el comienzo de un impulso más amplio para reformar el funcionamiento del juego en la era digital.