PARÍS (Reuters) – El primer ministro francés, Jean Castex, dijo el jueves que hacer que la vacunación sea obligatoria para frenar el nuevo coronavirus no sería de mucha ayuda, ya que esa medida traería más problemas que soluciones.
«Ya tenemos algunas dificultades para controlar el cumplimiento del pase de salud. Esas dificultades serían aún mayores si hiciéramos obligatoria la vacunación», dijo Castex a BFM TV y RMC Radio.
El miércoles, Francia registró un récord de más de 332.252 nuevos casos de COVID-19 en las últimas 24 horas y otras 246 muertes por COVID en hospitales.
Italia hizo obligatoria la vacunación contra el COVID-19 para las personas a partir de los 50 años, uno de los pocos países europeos que tomó medidas similares, en un intento por aliviar la presión sobre su servicio de salud y reducir las muertes.
(Reporte de Benoit Van Overstraeten; Editado por Sudip Kar-Gupta)