El primer ministro de Laos, Phankham Viphavanh, renunció el viernes por motivos de salud, luego de ocupar el cargo por menos de dos años en medio de una economía en crisis, con una inflación vertiginosa y una fuerte caída en el valor de la moneda, el kip.
Viphavanh, de 72 años, presentó su renuncia a la Asamblea Nacional ese mismo día. Asumió el cargo en abril de 2021 luego de una elección general.
“En la situación actual, nuestro país está pasando por muchas dificultades. Ya no puedo seguir haciendo este difícil trabajo”, dijo en un discurso en la Asamblea Nacional de Laos. Dijo que presentó su renuncia al presidente el 15 de diciembre y el presidente accedió a su solicitud.
El cambio de liderazgo se produce cuando el gobierno trata de moderar la inflación que ha alcanzado casi el 40 por ciento, y la gente se queja de que el precio de algunas necesidades básicas casi se ha duplicado.
Unas 500.000 personas, o el 21% de la fuerza laboral, están desempleadas por el centro económico y la pandemia del coronavirus, según el Ministerio de Trabajo y Previsión Social.
Minutos después del discurso de Viphavahn, los legisladores del gobierno de partido único del país votaron abrumadoramente por el Viceprimer Ministro. Sonexay Siphandone será el nuevo primer ministro de la nación del sudeste asiático.
El presidente Thongloun Sisoulith, quien también es secretario general del Partido Revolucionario del Pueblo Lao, ha sido el presidente del país desde marzo de 2021.
En su discurso de aceptación, Siphandone, de 56 años, dijo que se sentía honrado y muy orgulloso de ser elegido primer ministro. Es el hijo educado en la Unión Soviética de Khamtai Siphandone, de 92 años, expresidente de Laos.
La constitución del país permite que los primeros ministros ocupen un máximo de dos mandatos de cinco años.
La renuncia de Viphavanh se produce en medio de críticas de que otorgó demasiadas concesiones para la explotación minera, especialmente en las provincias norteñas de Xieng Khouang y Xaysomboun, dijo una fuente con conocimiento de la escena política. Cuando los impuestos de las operaciones no entraron en el presupuesto estatal, la deuda del país se disparó.
Viphavanh tampoco logró avanzar en la represión de la corrupción desenfrenada, dijo la fuente.
El presidente de la Organización de Auditoría del Estado informó al parlamento la semana pasada que 141 000 millones de kip, o unos 9 millones de dólares estadounidenses, de ingresos fiscales no entraron en el presupuesto estatal y que más de 1430 empresas, la mayoría chinas, no habían pagado impuestos a el gobierno de Laos durante más de un año.
Ministro de Finanzas Bounchom Oubonpaseuth también dijo a los legisladores que al menos 53 empleados de su ministerio habían sido sancionados o despedidos por corrupción en 2022.
Algunos ciudadanos de Laos dijeron que esperaban que el nuevo primer ministro pudiera resolver los problemas financieros y económicos actuales del país, especialmente la alta inflación y la depreciación de la moneda de Laos, el kip.
Pero el dueño de una tienda minorista en la provincia de Savannakhet no era optimista. “No creo que el nuevo primer ministro vaya a marcar ninguna diferencia”, dijo. “Quien esté arriba, será igual”.
Traducido por Max Avary para RFA Lao. Escrito en inglés por Roseanne Gerin. Editado por Malcolm Foster.
