En una intervención en Samoa, donde se reunió con residentes que se vieron obligados a abandonar sus hogares debido al aumento del nivel del mar y la erosión costera, Guterres dijo que los habitantes de las islas del Pacífico se habían negado a ser víctimas del cambio climático, pero que sus ambiciosos planes para resistir esta “amenaza existencial para millones de personas” habían quedado en suspenso por falta de los fondos prometidos, insistió.
«Luchamos duro por la justicia climática…[but] No estamos viendo el dinero que se necesita «Y es por eso que pedimos la reforma y las instituciones financieras internacionales para que se satisfagan las necesidades de financiación de los países, como los países del Pacífico», dijo el jefe de la ONU a los periodistas en la Casa de la ONU en Apia, la capital.
Más que palabras
Los gestos positivos de las naciones ricas hacia los países en desarrollo han sido insuficientes para compensar los impactos económicos de los desastres naturales causados por el cambio climático, insistió Guterres, señalando la Fondo de pérdidas y dañosacordado en 2022 en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) en Egipto.
Los países desarrollados también se comprometieron en 2021 a duplicar la financiación para la adaptación climática desde los 100.000 millones de dólares anuales acordados en 2009, dijo el Secretario General, al tiempo que señaló que esta fuente de ingresos potencialmente revolucionaria tampoco había obtenido suficiente apoyo.
“Necesitamos que todos los países cumplan sus promesas sobre financiación climática y un sólido resultado financiero de la COP de este año, donde discutiremos los compromisos financieros después de 2025”, dijo.
El malecón bajo asedio
En declaraciones a los periodistas, el jefe de la ONU describió cómo los samoanos han respondido repetidamente a los impactos climáticos, incluido el mortal tsunami de 2009 que dejó al menos 192 muertos.
“Hemos visto a gente que ha trasladado sus casas al interior. Hemos visto a gente que ha persistido en volver y reconstruir. Hemos visto una enorme determinación por parte de la gente para luchar no sólo contra el impacto del tsunami, sino también contra el impacto del aumento del nivel del mar y de las tormentas y los ciclones”, afirmó.
“He visto un muro que protege a un pueblo del mar; ese muro en 20 años, debido al tsunami, debido al aumento del nivel del mar y debido a las fuertes tormentas, Ya se ha construido tres veces.”
Desigualdades financieras
Muchos países en desarrollo, como Samoa, que también están en la primera línea de la crisis climática, deben recurrir a préstamos de prestamistas internacionales a tasas más altas que las naciones más pobres del mundo, lo que les ha impedido efectivamente acceder a los fondos que necesitan para ayudarse a sí mismos.
Para abordar esta desigualdad estructural histórica en las finanzas internacionales, la ONU ha trabajado con los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID) en una nueva medición del ingreso nacional –el Índice de Vulnerabilidad Multidimensional (IVM)– para que ellos también puedan acceder a la importante financiación necesaria para el desarrollo sostenible.
“Pedimos a la comunidad internacional que actúe de manera que cuando las instituciones financieras internacionales traten con países como Samoa, el Índice de Vulnerabilidad Multidimensional sea tomado en cuenta para permitir que se otorguen fondos concesionales para los proyectos que sean necesarios Para que este país logre el Objetivos de Desarrollo Sostenible y proteger a sus poblaciones contra el cambio climático”, dijo Guterres.
Elaboración de soluciones
El Secretario General también reiteró su deseo de que los pequeños Estados insulares como Samoa tengan acceso a unos 80.000 millones de dólares en financiación para el desarrollo vinculada a Derechos especiales de giroque pueden ser canalizados por los miembros del Fondo Monetario Internacional (FMI) a los bancos multilaterales de desarrollo para que estén disponibles para préstamos.
Nuevas fuentes de ingresos como ésta son cruciales para países como Samoa, que perdieron ingresos turísticos vitales debido a la COVID-19 “No hemos recibido el apoyo de la comunidad internacional”, añadió Guterres. “Cuando analizamos el caso de Samoa, entendemos lo que eso significa y nunca dejamos de luchar para asegurarnos de que la comunidad internacional lo reconozca”.