En su apogeo de los noventa, más de mil millones de personas vieron vigilantes de la playa cada semana. Muchos de estos espectadores sintonizaron para maravillarse con un traje de baño rojo que luchaba por contener a Pamela Anderson mientras corría por una playa en cámara lenta.
El Museo del Diseño de Londres espera que la gente quiera mirar dicho traje de baño sin que Anderson amenace con salirse de él como si fuera un rompepefres del Extranjero cine. El museo expone esta prenda de baño en el marco de una exposición dedicada a la natación y al amor de la gente por el agua. «¡Chapoteo! Un siglo de natación y estilo” se desarrollará del 28 de marzo al 17 de agosto de 2025.
El espectáculo profundizará en la evolución de la natación durante el último siglo en tres localizaciones: la piscina, el lido y la naturaleza. «La historia de la exposición comenzará en la década de 1920, cuando los trajes de baño comenzaron a comercializarse para nadar en lugar de la preferencia victoriana por bañarse, y cuando las vacaciones en la playa explotaron en popularidad», dijo el Museo del Diseño en un comunicado. «Explorará hasta el día de hoy y el papel de la natación en la vida moderna, como cómo influye y subvierte nuestras ideas de autonomía y agencia del cuerpo, así como su vínculo con las cuestiones ambientales».
Más de 200 objetos mapearán la evolución de la natación en sus contextos social, cultural, tecnológico y ambiental. Se incluirán la primera medalla de oro olímpica ganada por un nadador británico, diez pares de Speedos masculinos de la década de 1980 y el traje de baño LZR Racer prohibido por “dopaje técnico”.
También se exhibirá un modelo arquitectónico del Centro Acuático de Londres diseñado por Zara Hadid en 2012 y uno de los primeros ejemplos supervivientes de un traje de baño de dos piezas, acuñado por primera vez como bikini en 1946. Ese año, el diseñador francés Louis Réard lanzó su creación en París; lleva el nombre de un arrecife de coral en las Islas Marshall llamado Bikini Atoll, donde Estados Unidos probó armas nucleares.
“Es increíble mostrar la icónica figura de Pamela Anderson. vigilantes de la playa traje de baño en la exposición, especialmente en este punto crucial en el que ha reclamado su propia imagen y ha diseñado y modelado su propio traje de baño”, dijo la historiadora de vestimenta y diseño Amber Butchart, quien fue co-curadora de “Splash”.
“[The history of swimwear is interesting because] refleja cambios más amplios en la sociedad durante el siglo pasado, ya sea en torno a cuestiones de autonomía y agencia corporal, o cómo pasamos nuestro tiempo libre”, añadió.