El Sindicato de Policía, Prisiones y Derechos Civiles (Popcru) dice que el hacinamiento en las cárceles sigue siendo un desafío serio para los funcionarios penitenciarios.
Más temprano, el ministro de Justicia y Servicios Correccionales, Ronald Lamola, reveló que la población carcelaria ha aumentado un 7,67 % entre los ejercicios 2020/2021 y 2022/2023.
Esto constituye un aumento de 10 807 reclusos.
Lamola reveló esto en una respuesta escrita a una pregunta parlamentaria de Economic Freedom Fighters (EFF) en el Consejo Nacional de Provincias (NCOP).
Para octubre de 2022, la población total era de 151 755 reclusos en prisión.
El portavoz de Popcru, Richard Mamabolo, dice: “Nuestros miembros enfrentan desafíos regularmente, porque tienen que cuidar a una población más grande de reclusos y esto resulta en altercados donde los miembros son apuñalados o incluso los propios reclusos continúan peleando entre ellos”.
“Entonces, estos son los problemas que el departamento debe investigar. Sin embargo, confiamos en el actual Comisionado Nacional de la DSC, quien acordó comprometerse con todas las partes interesadas para buscar qué soluciones se pueden implementar”, explica Mamabolo.
Mientras tanto, el ministro Lamola dice que el impacto del hacinamiento sigue siendo un desafío que continúa ejerciendo presión sobre los recursos disponibles.
Agrega que los factores externos que inciden directamente en los niveles de población carcelaria incluyen las tendencias delictivas en la sociedad, la tasa de desempleo, la economía, el aumento de medidas efectivas para combatir y perseguir el delito, así como el impedimento de legislar sobre sentencias mínimas obligatorias.
El Ministro también dice que el Departamento de Servicios Correccionales no tiene control sobre la afluencia de reclusos de los tribunales.
Él dice que a fines de septiembre del año pasado, había 2 973 delincuentes sentenciados que aún estaban bajo custodia y no podían pagar sus multas.
El siguiente video informa más sobre la historia.