Abuya, Nigeria — El ejército nigeriano ha prometido una respuesta contundente tras la mortal emboscada que mató a seis de sus soldados en el estado central de Níger. El ataque se produjo el viernes pasado durante una misión de patrulla en la aldea de Karaga, en la zona de Shiroro, como parte de los esfuerzos de mantenimiento de la paz en curso en la región.
Según un comunicado oficial del ejército, los soldados, entre ellos dos oficiales superiores y otros cuatro miembros del personal, estaban en una «patrulla de combate» cuando fueron emboscados por individuos que el ejército ha calificado de «terroristas».
El ejército informó que había matado a varios atacantes durante el incidente y que estaba persiguiendo activamente a otros involucrados.
«Las tropas vengarán el desafortunado revés», afirmó el ejército, señalando su intención de intensificar las acciones militares contra los perpetradores.
Además de las muertes, dos agentes resultaron heridos durante la emboscada y hay informes locales no confirmados sobre el secuestro de un agente.
Si bien el grupo específico detrás de la emboscada no ha sido identificado oficialmente, las bandas armadas, a menudo denominadas localmente bandidos, han atacado cada vez más a las fuerzas de seguridad en ataques recientes en toda Nigeria.
Este incidente pone de relieve los actuales desafíos de seguridad en el país, que incluyen no sólo el bandidaje sino también los secuestros para pedir rescate y diversas insurgencias yihadistas.
El momento de la emboscada coincide con una cumbre africana de alto nivel contra el terrorismo organizada por Nigeria en la capital, Abuja, destacando los problemas críticos de seguridad que enfrenta la región.
Este ataque sigue de cerca a otro trágico incidente en el que 16 soldados murieron en el estado sureño de Delta en medio de enfrentamientos entre comunidades rivales.
La promesa del ejército nigeriano de tomar represalias subraya la lucha actual del gobierno para asegurar la paz y la estabilidad en sus territorios, en medio de una escalada de violencia y preocupaciones generalizadas de seguridad.