La policía ecuatoriana incineró el jueves 9,3 toneladas de cocaína, aunque le quedó pendiente destruir otras 150 toneladas decomisadas en los últimos años en todo el país andino, que según las autoridades es utilizada para almacenamiento y embarque por los traficantes de drogas.
El ministro del Interior, Patricio Carrillo, en rueda de prensa, dijo que “se ha hecho el pesaje adecuado con la presencia de la autoridad competente”, al tiempo de señalar que mediante un análisis aleatorio los agentes verificaron el peso y la calidad de la droga antes de su destrucción, que se hizo en hornos calibrados a 900 grados centígrados.
Destacó que anteriormente se incineraron 37 toneladas, que sumadas a las 9,3 de esta jornada, dan un total de 46 toneladas destruidas mediante procesos que permiten el cuidado del ambiente, según las autoridades.
Aseguró que en adelante los procesos de destrucción de narcóticos se realizarán con mayor fluidez cumpliendo con todos los protocolos legales.
Hace 15 días desde una bodega de la policía, narcotraficantes robaron casi tres toneladas de cocaína, luego de someter al custodio policial, pero poco después los uniformados lograron recuperar ese monto, aunque no podrán capturar a los delincuentes.
Ecuador se ha convertido en una plataforma de almacenamiento y embarque de grandes cantidades de drogas provenientes principalmente de carteles de Colombia y Perú, que buscan enviarlas hacia Estados Unidos y Europa, de acuerdo con las autoridades. En 2019 se decomisaron 79 toneladas de estupefacientes, el siguiente año 128 toneladas y en el 2021 un total de 210 toneladas. En tanto, en lo que va del 2022 la policía antinarcóticos ha incautado más de 72 toneladas.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de Youtube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Gorjeo mi Instagram.