Imagen de un cultivo de tuberculosis. Crédito: CDC/Dr. George Kubica – Dominio público
Se han detectado al menos 19 casos de sospecha de tuberculosis en un colegio de Galicia, según han confirmado las autoridades sanitarias de la Comunidad.
El hecho ocurrió entre estudiantes de sexto grado de la Colegio IES Julio Prieto Nespereira en el distrito de O Vinteún de Ourense.
Todos los afectados han sido aislados en sus domicilios y están siendo vigilados por las autoridades. Todavía están siendo sometidos a estudios de rutina para verificar la existencia de la enfermedad porque una prueba positiva por sí sola solo indica un posible contacto previo con la bacteria de la tuberculosis.
La Dirección Xeral de Saúde Pública de Galicia (Dirección General de Salud Pública) envió un mensaje para que los vecinos mantengan la calma. Aseguraron que se están realizando todas las actividades necesarias para limitar la transmisión de esta enfermedad y la aparición de nuevos casos en la escuela.
Fuentes de la Conselleria de Sanidade Explicó que una vez conocido el primer caso se puso en marcha el protocolo existente en Galicia para analizar el riesgo potencial de transmisión y detectar precozmente posibles contagios.
Tal y como precisan las mismas fuentes, en consecuencia, se organizó el estudio de contactos, priorizando los contactos más cercanos, aquellos que convivían más de seis horas diarias con los pacientes, según La Voz de Galicia.
Sanidade aclaró que no se podía hablar de un brote en la escuela, porque las pruebas positivas solo indicaban que esa persona estuvo en contacto con la bacteria, pero no que tuviera la enfermedad.
El Programa Gallego de Prevención y Control de la Tuberculosis -que funciona en Galicia desde 1994- afirma: “La tuberculosis es una enfermedad infecciosa prevenible y curable que se transmite por el aire. Cuando los casos se detectan a tiempo y reciben un tratamiento completo, los pacientes rápidamente dejan de ser contagiosos y se curan”.
La tuberculosis (TB) es una infección que generalmente afecta los pulmones. Se puede tratar con antibióticos, pero puede ser grave si no se trata. Existe una vacuna que ayuda a proteger a algunas personas que están en riesgo de contraer la enfermedad, según el NHS.
Los síntomas normalmente aparecen gradualmente en los pacientes y pueden incluir fiebre alta o sudores nocturnos, tos que dura más de 3 semanas, durante las cuales se expulsan flemas o mocos con sangre. Otros signos incluyen sentirse cansado o agotado, pérdida de apetito, pérdida de peso o, en general, simplemente sentirse mal.