SINGAPUR: Una criada indonesia reclamará juicio por el cargo de causar daños graves mediante un acto imprudente, que provocó que una niña de cuatro años fuera atropellada mortalmente por un coche en River Valley.
El abogado de Lilyana Eva, de 32 años, informó el miércoles (8 de enero) a un tribunal de distrito que ella no se declararía culpable.
Lilyana fue acusada el 6 de noviembre de 2024 de cometer el acto imprudente poco antes de las 5 p.m. del 23 de enero de 2024.
Se la acusa de no garantizar la seguridad de Zara Mei Orlic al llevarla a cruzar la calle a lo largo de Institution Hill en un cruce no señalizado sin sujetarla.
Esto supuestamente provocó que el niño cruzara la calle corriendo y fuera atropellado por un coche, causándole lesiones graves.
El coche conducido por una mujer australiana de 40 años chocó con Zara en el segundo carril y le atropelló la pierna y la cabeza.
Zara fue llevada al hospital pero murió esa misma noche a causa de heridas en la cabeza, según encontró una investigación forense en julio de 2024.
Una investigación de la policía de tránsito mostró que el conductor no iba a gran velocidad y que Zara había aparecido en las imágenes dentro del vehículo solo un segundo antes de que se produjera la colisión.
Como Zara medía sólo 100 cm de altura, era demasiado baja para que el conductor la viera.
El forense dijo que el accidente fue «un recordatorio oportuno para los cuidadores de niños pequeños de la importancia de la seguridad vial, ya que siempre deben tomar la mano de un niño pequeño al cruzar la calle».
Dijo que los niños pequeños no tienen un sentido agudo de los peligros del camino y son propensos a hacer movimientos rápidos.
El caso también demostró que los niños pequeños pueden quedar ocultos por otros vehículos u objetos cercanos debido a su constitución física más pequeña, dijo el forense.
El miércoles, la abogada de Lilyana, Lolita Andrew, solicitó una fecha para una conferencia previa al juicio y se le dio una fecha para el 31 de enero.
Lilyana sigue en libertad bajo fianza de 15.000 dólares singapurenses (11.000 dólares estadounidenses).
El delito de causar daños graves mediante un acto imprudente conlleva una pena de cárcel de hasta cuatro años, una multa de hasta 10.000 dólares singapurenses, o ambas.