Mike Shabb ha sido un arma secreta en la escena del rap de Montreal durante años. En lugar de producir otros sonidos básicos de la ciudad (el electro funk bailable de Kaytranada o Planet Giza, la catarsis industrial y con tintes metálicos del trasplante de Zambia Backxwash), Shabb se inclina hacia el formalismo new-age del productor Nicholas Craven y raperos como Chung. Comenzó a hacer trap alrededor de 2017, pero también era fanático del clásico boom-bap y los loops aireados y sin batería que aún definen ciertos rincones del hip-hop underground. Después de conectarse con Craven, afiliado de Griselda, Shabb trabajó para refinar sus diversos sonidos, lanzando porros vibrantes como los de 2021. Flujo de cuarentena y 2023 Olimpiadas de capó mientras se hace ingeniería ad hoc para Boldy James y obteniendo múltiples ubicaciones de ritmo en Westside Gunn’s 10.
Shabb tiene oído para seductor muestras y sabe cómo convertirlos en ritmos lo suficientemente espaciosos como para que los amantes de los paisajes como Estee Nack los atraviesen. Después de la atractiva y sencilla producción de junto al mar IIque enfatizaba alardes, koans y confesiones contadas a través de su ingenioso insulto de Montreal, llega más alto y profundiza en la edición de este año. Costa III. Los ritmos son más extraños, la lista de invitados es más completa e incluso parece haber instrumentos en vivo en la mezcla. Shabb se vuelve más grandioso sin intentar arreglar lo que no está roto, dejando que zarcillos nudosos crezcan a partir de una base ya sólida.
Como rapero, Shabb toma la ruta del estilo de vida y detalla su día a día en el 514. No es conciso. poético como Boldy o un caricaturesco matón como Gunn o Nack; Dependiendo de si está lanzando metáforas o simplemente contando historias, su voz graznida oscila entre fría y abatida. La mayor parte del tiempo, está apostado en el bloque y planeando los próximos movimientos mientras el miedo y el arrepentimiento persisten en los márgenes. En «Grinchy», donde está enmascarado como MF DOOM y cargando un perro como Jim Carrey en Como el Grinch robó la Navidad, una línea perdida sobresale del piano y delata los verdaderos sentimientos de Shabb: «Mantengo la cabeza en alto en situaciones que no puedo afrontar». Ese sentimiento se transmite en cada momento del álbum, desde los tirones de porros en medio de tiroteos donde los blancos corren como Forrest Gump (“Free Cars”) hasta conmemorar a amigos caídos y cuidar de sus hijos como Shep en Por encima de la llanta (“Julia”). Momentos fugaces de tristeza demuestran que solo se ha bajado la máscara hasta cierto punto, y esa intriga hace que cada viñeta sea convincente.