Los bebés pueden diferenciar la mayoría de los sonidos poco después del nacimiento y, al año de edad, se convierten en oyentes de un idioma específico. Pero los investigadores todavía están tratando de entender cómo los bebés reconocen qué dimensiones acústicas de su lenguaje son contrastantes, un término lingüístico que describe las diferencias entre los sonidos del habla que pueden cambiar el significado de las palabras. Por ejemplo, en inglés, las letras b y d contrastan, porque al cambiar la b en «ball» por ad, se convierte en una palabra diferente, «doll».
Un artículo reciente en procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias (PNAS) por dos lingüistas computacionales afiliados a la Universidad de Maryland ofrece una nueva visión sobre este tema, que es imprescindible para una mejor comprensión de cómo los bebés aprenden cuáles son los sonidos de su lengua materna.
Su investigación muestra que la capacidad de un bebé para interpretar las diferencias acústicas como contrastivas o no contrastivas puede provenir de los contextos en los que se producen los diferentes sonidos.
Durante mucho tiempo, los investigadores creyeron que habría diferencias obvias entre la forma en que se pronuncian los sonidos contrastantes, como las vocales cortas y largas en japonés. Sin embargo, aunque las pronunciaciones de estos dos sonidos son diferentes en un discurso cuidadoso, la acústica suele ser mucho más ambigua en entornos más naturales.
«Esta es una de las primeras cuentas de aprendizaje fonético que se ha demostrado que funciona con datos espontáneos, lo que sugiere que los bebés podrían estar aprendiendo qué dimensiones acústicas contrastan después de todo», dice Kasia Hitczenko, autora principal del artículo.
Hitczenko se graduó de la Universidad de Maryland en 2019 con un doctorado en lingüística. Actualmente es becaria postdoctoral en el Laboratorio de Ciencias Cognitivas y Psicolingüística de la Ecole Normale Supérieure de París.
El trabajo de Hitczenko muestra que los bebés pueden diferenciar los sonidos acústicos en función de las claves del contexto, como los sonidos vecinos. Su equipo probó su teoría en dos estudios de caso con dos definiciones diferentes de contexto, comparando datos sobre japonés, holandés y francés.
Los investigadores recopilaron discursos que ocurrieron en diferentes contextos e hicieron gráficos que resumían la duración de las vocales en cada contexto. En japonés, encontraron que estas gráficas de duración de las vocales variaban claramente en diferentes contextos, porque algunos contextos tenían más vocales cortas, mientras que otros contextos tenían más vocales largas. En francés, estos diagramas de duración de las vocales fueron similares en todos los contextos.
«Creemos que este trabajo presenta un relato convincente sobre cómo los bebés aprenden los contrastes del habla de su idioma y muestra que la señal necesaria está presente en el habla naturalista, lo que mejora nuestra comprensión del aprendizaje temprano del idioma», dice la coautora Naomi Feldman, asociada profesor de lingüística con nombramiento en el Instituto de Estudios Informáticos Avanzados de la Universidad de Maryland (UMIACS).
Feldman agrega que la señal que estudiaron es válida en la mayoría de los idiomas, y es probable que su resultado pueda generalizarse a otros contrastes.
La investigación recientemente publicada es una extensión de El doctorado de Hitczenko tesisque examinó cómo usar el contexto para el aprendizaje fonético y la percepción del habla naturalista.
Un enfoque computacional para comprender cómo los bebés perciben el lenguaje
Kasia Hitczenko et al, El habla naturalista apoya el aprendizaje distributivo en todos los contextos, procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias (2022). DOI: 10.1073/pnas.2123230119
Citación: ¿Cómo pueden los bebés aprender sobre los sonidos en su lengua materna? (2022, 19 de septiembre) recuperado el 19 de septiembre de 2022 de https://medicalxpress.com/news/2022-09-infants-native-language.html
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