Los científicos australianos están trabajando con las principales compañías médicas para desarrollar drogas psicodélicas para personas con ciertas condiciones.
El CSIRO está trabajando con compañías biomédicas para mejorar y desarrollar psicodélicos para ayudar a las personas con problemas de salud mental, incluida la depresión, la adicción y el trastorno de estrés postraumático.
Los psicodélicos como la metilendioximetanfetamina (MDMA) y la psilocibina, que se deriva de ciertas especies de hongos, se están probando en Australia e internacionalmente en entornos controlados.
Los investigadores tienen como objetivo determinar si pueden ser un tratamiento eficaz con psicoterapia; el CSIRO dice que los resultados han sido prometedores hasta ahora.
Se estima que uno de cada cinco australianos sufre una enfermedad mental al año, pero muchos no responden a los tratamientos existentes.
“CSIRO está en una buena posición para contribuir a esta área emergente de investigación, que podría conducir a avances en la salud mental que cambien la vida”, dijo Peter Duggan, científico de CSIRO.
“Los ensayos clínicos, tanto aquí como a nivel internacional, han estado usando psicodélicos conocidos, generalmente MDMA o psilocibina… con resultados impresionantes, pero aún queda mucho por aprender sobre cómo funcionan estos medicamentos y cómo las mejoras en su composición química podrían mejorar los resultados de los pacientes.
“Al trabajar con la industria local para mejorar el diseño de medicamentos y la experiencia del paciente, CSIRO puede llevar a Australia a una posición de liderazgo en el desarrollo de estos medicamentos que pueden cambiar la vida”.
Una de las empresas es Natural MedTech, con sede en Melbourne, que tiene como objetivo explorar más a fondo las propiedades psicoactivas de las plantas y los hongos.
“Natural MedTech está trabajando para desarrollar tratamientos psicodélicos para varios trastornos neurológicos no resueltos”, dijo el director ejecutivo Mark Hestermann.
“Trabajar con CSIRO nos permite trabajar con algunos de los principales científicos de Australia y acceder a instalaciones de vanguardia para cumplir con los requisitos únicos de Natural MedTech.
“La extensión de la licencia de venenos programada de CSIRO significará que pueden fabricar legalmente la materia prima que necesitamos para avanzar en nuestra investigación y desarrollo de moléculas psicodélicas con el fin de llevar nuevos medicamentos a los ensayos clínicos”.