“Seguramente tales travesuras de entrevistas son pocas y distantes entre sí”, podría pensar uno.
En realidad, no lo son. A partir de mis dos décadas de experiencia en recursos humanos y reclutamiento, hay historias de advertencia tanto de entrevistadores como de entrevistados que se portan mal.
UN MERCADO LABORAL REFORMADO
No hay duda de que la pandemia de COVID-19 ha remodelado drásticamente el mercado laboral, lo que ha resultado en un cambio significativo hacia el trabajo remoto, las reuniones de Zoom y las entrevistas de trabajo en línea.
Sin embargo, a medida que el mundo recupera una apariencia de normalidad y más empleados regresan a la oficina, las entrevistas de trabajo en persona también vuelven cada vez más a estar de moda.
Una encuesta reciente de más de 2000 adultos realizada por la American Staffing Association mostró que el 70 % de los encuestados prefería las entrevistas de trabajo en persona, en comparación con el 17 % que prefería las entrevistas en video y el 9 % que prefería las llamadas de solo audio.
En el mercado laboral competitivo de hoy, el incidente del café trae un enfoque renovado en la etiqueta profesional.
Según estimaciones anticipadas del mercado laboral publicadas por el Ministerio de Mano de Obra (MOM) el 28 de abril, el empleo total, excluyendo a los trabajadores domésticos migrantes, creció en 34.500 en el primer trimestre del año, marcando el sexto trimestre consecutivo de expansión.
No hace falta decir que tanto los buscadores de empleo como los reclutadores siempre deben ser profesionales durante y después de la entrevista. Como en todo, siempre hay un pero…
LA PRESENTACIÓN IDEAL
Durante el curso de mi trabajo, personalmente he observado más de unos pocos comportamientos poco profesionales que pueden servir como buenas lecciones de aprendizaje.