El presidente chileno Gabriel Boric cambió el viernes a cinco ministros de su gabinete, entre ellos a la titular de Relaciones Exteriores, así como a varios subsecretarios en un esfuerzo del mandatario izquierdista por dar un nuevo impulso a su gestión al iniciar su segundo año de gobierno.
El mandatario nombró al exvicecanciller Alberto van Klaveren en reemplazo de Antonia Urrejola, quien se vio envuelta en varias controversias a lo largo de su período a la cabeza de la cancillería y era una de las ministras peor evaluadas.
Van Klaveren, académico y exembajador, lideró también a partir de 2008 el equipo chileno ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya en la demanda que planteó Perú por un límite marítimo.
El presidente izquierdista, que el sábado cumple su primer año al mando del mayor productor global de cobre, también nombró a Jessica López en la cartera de Obras Públicas, a Jaime de Aguirre en Cultura, al exseleccionado nacional de fútbol Jaime Pizarro en Deportes ya Aisén Etcheverry en Ciencias.
En Chile hay 24 ministerios. Boric también cambió a 15 subsecretarios, entre ellos a los de Hacienda, Relaciones Económicas Internacionales y Defensa.
«Lo que me motiva para hacer estos cambios (…), pese a todo lo que se ha especulado durante las ultimas semanas, no son las presiones politicas ni las compensaciones menores. El proposito es mejorar nuestra capacidad de respuesta y mejorar las gestiones ante las urgencias que hoy día tiene nuestra patria y nuestros ciudadanos», dijo Boric durante una ceremonia.
«Hemos tenido dificultades, quién podría negarlo», dijo el presidente al tomar juramento a su nuevo equipo, enfatizando que «ya no es tiempo de diagnóstico, es tiempo de acción».
Entre los problemas que aparecieron el gobernante figuraron los recientes incendios forestales que arrasaron millas de hectáreas en el centro sur del país, las cifras de delincuencia en momentos que el país enfrenta un avance de los delitos violentos y la inflación, que está en las cifras más altas en tres décadas en medio de una desaceleración de la economía.
Esta semana, además, el gobierno sufrió un duro golpe político cuando la Cámara de Diputados rechazó tramitar su proyecto de reforma tributaria, clave para cumplir sus promesas de campaña. El gobierno aún no define qué pasos seguirán para insistir con su propuesta.
«La tónica general de todo lo que ha pasado con el gobierno es una moderación gradual y forzada. Boric se ha ido moviendo hacia el centro, hacia la moderación, la socialdemocracia, dejando un poco atrás ese espíritu refundacional que tuvo cuando asumió», dijo a Reuters el analista político Kenneth Bunker.
Pero los cambios anunciados el viernes, sin embargo, están enfocados más bien en resolver falencias sectoriales y podrían ser insuficientes para abordar «el principal problema del gobierno, que es político y estratégico», agregó.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Gorjeo mi Instagram.