En esta edición, analizamos el impacto de un retraso en la ley de deforestación de la UE y analizamos el enérgico discurso de Viktor Orbán en Estrasburgo.
Esta semana, nos acompañan tres eurodiputados: el holandés Sander Smit, del Movimiento Campesino-Ciudadano del Partido Popular Europeo, la alemana Anna Cavazzini, la Verde alemana, y la sueca Emma Wiesner, de Renew Europe.
El panel reacciona a una decisión de la Comisión Europea de retrasar la implementación del Reglamento de Deforestación de la UE, una parte clave del Acuerdo Verde del bloque que debía entrar en vigor en diciembre.
Según la ley, los comerciantes que hagan negocios en la UE tendrían que demostrar que los productos, desde el café hasta los muebles, no provienen de tierras deforestadas.
Anna Cavazzini calificó el aplazamiento como una tragedia.
«Estamos en este momento en una crisis global de deforestación. Los incendios forestales están destruyendo el Amazonas, destruyendo animales, destruyendo los medios de vida de los pueblos indígenas y todos sabemos que necesitamos los bosques para nuestro futuro», dijo.
Pero su homólogo de Suecia dijo que los responsables políticos debían ser realistas.
«Tuve grandes problemas cuando se reguló esta norma, simplemente porque aplicamos demasiadas acciones legales a las directrices de la Comisión», dijo Emma Wiesner, que votó en contra de la ley.
El panel también discutió la visita de Viktor Orbán a Estrasburgo esta semana. Como jefe rotatorio del Consejo de la UE, el Primer Ministro húngaro fue invitado a exponer su visión de la UE. Dijo a los eurodiputados que bebería champán si Donald Trump ganara las elecciones estadounidenses. Algunos legisladores jugaron Candy Crush para expresar su desdén, mientras que otros lo tildaron de dictador.
Fue una intervención de confrontación, dijo Sander Smit.
La debacle «no fue un buen día para la reputación de nuestra institución y de las instituciones en general. Creo que porque vimos a la izquierda radical y a la derecha radical creando disturbios, gritando, cantando», afirmó.
Mira ‘¿Bruselas, mi amor?’ en el reproductor de arriba.