Los Hawks en Gauteng dicen que la gran demanda de cobre y los precios lucrativos que ofrece están alimentando el vandalismo de la red eléctrica del país.
Esto surgió en el segundo día de Johannesburg Energy Indaba en Sandton, al norte de Johannesburgo.
Se ha culpado al vandalismo de la infraestructura eléctrica, incluido el robo de cables de cobre, de hundir a Sudáfrica en la oscuridad.
Se dice que los perpetradores son parte de un sindicato fuertemente armado.
El jefe de los halcones en Gauteng, el mayor general Ebrahim Kadwa, dice que muchas personas están siendo acusadas y los perpetradores sentenciados a largas penas de prisión.
“La mayor parte del cobre se envía a los mercados internacionales. La Comisión de Administración y Comercio Internacional (Itac) ha controlado estrictamente la emisión de permisos de exportación. Pero con respecto a los cables de cobre la política actual… los permisos son [still] emitido. Pero que malo [copper cable thieves] está haciendo, está trabajando con compañías navieras cómplices. Son capaces de manipular el código de declaración de aduanas y le darían [to] chatarra en lugar de productos de cobre”, dice Kadwa.
El siguiente video informa sobre el impacto del robo de cables en Johannesburgo:
A principios de este mes, Noticias SABC informó que los ladrones de cables ahora se dirigían a áreas suburbanas prósperas en Tshwane y sus alrededores.
Los residentes de varias fincas y complejos residenciales, así como los dueños de negocios, están en pie de guerra por los incesantes cortes de energía causados por el robo de cables.
Dicen: “Nos hemos estado reuniendo durante los últimos días debido a los graves problemas que enfrentamos como comunidad. Uno de los mayores problemas será el robo de cables, la falta de electricidad y, a veces, el robo de cables. A veces no tenemos electricidad durante dos días. O una vez a la semana.
Mientras tanto, los residentes de Eldorado Park agregaron que están sufriendo el mismo destino y han acusado a los desguaces locales de alentar el robo de cables comprándolos a los delincuentes.
Los residentes de Eldorado Park sospechan de un sindicato organizado en la reciente ola de robo de cables: