La resolución aprobada por unanimidad por el organismo de 15 miembros en Nueva York, exige la “participación plena, equitativa, significativa y segura de mujeres y niñas en Afganistán”e insta a todos los países y organizaciones con influencia sobre los gobernantes fundamentalistas del país, a “promover una reversión urgente” de las políticas que en efecto han borrado a las mujeres de la vida pública.
Desde la toma del poder por parte de los talibanes en julio de 2021, cuando sus fuerzas derrocaron al gobierno elegido democráticamente, ha revertido una amplia gama de derechos humanos de mujeres y niñas, incluida la prohibición de asistir a la escuela secundaria y la universidad, restricciones de movimiento y trabajo, y en diciembre, un decreto que prohibía a las mujeres nacionales trabajar en la mayoría de las ONG.
A principios de este mes, los talibanes extendieron su prohibición a las mujeres que trabajan para las Naciones Unidas.
La ONU subrayó su “condena inequívoca” de la medida a principios de abril, señalando que contraviene el derecho internacional, incluido el Carta de la ONU. Se ha dicho a todo el personal de la ONU que no se presente en la oficina, excepto para algunas tareas críticas, mientras se lleva a cabo una revisión operativa que concluye el 5 de mayo.
A récord de 28,3 millones de personas en Afganistán que necesitan asistencia este año, convirtiendo a Afganistán en la operación de ayuda más grande del mundo, con la ONU solicitando $ 4.6 mil millones para financiar completamente los esfuerzos de ayuda este año. El Coordinador Humanitario de la ONU advirtió este mes que Afganistán también era la operación menos financiada del mundo, con menos del cinco por ciento de fondos comprometidos hasta el momento.
‘Preocupación profunda’
El Consejo de Seguridad La resolución expone la “profunda preocupación” de los embajadores por la prohibición de que las mujeres trabajen en la ONU y dice que, junto con otras erosiones de los derechos básicos, “será afectar negativa y gravemente” las operaciones de ayuda de la ONU en todo el país“incluida la prestación de asistencia vital y servicios básicos a los más vulnerables”.
Destaca que la Misión de Asistencia de la ONU en el país, UNAMA, tampoco podrá implementar su mandato humanitario hasta que finalice la prohibición. La resolución enfatiza que la prohibición “es sin precedentes en la historia de las Naciones Unidas.”
Condiciones económicas y humanitarias ‘extremas’
La resolución también enfatiza la necesidad urgente de seguir abordando la «grave situación económica y humanitaria» de Afganistán y ayudar al país a restaurar la autosuficiencia, reconociendo la importancia de permitir que el Banco Central utilice activos que actualmente están congelados fuera del país.en beneficio del pueblo afgano.”
El Consejo respaldó el trabajo continuo de la UNAMA reiterando su “pleno apoyo”y pidió a todos los interesados en Afganistán, incluidas las autoridades talibanes, “que garantizar la seguridad y la libertad de circulación del personal de las Naciones Unidas y el personal asociado a través del país.»