Del 13 de mayo al 30 de julio de 2022, Hauser & Wirth presenta en Londres una exposición de obras recientes del artista Luchita Hurtado.
Fuente: Hauser & Wirth · Imagen: Luchita Hurtado, “Sin título”, c. 1976. Óleo sobre lienzo, 42,5 x 58,4 cm. © La Hacienda de Luchita Hurtado. Cortesía The Estate of Luchita Hurtado / Hauser & Wirth. Foto: Jeff McLane
Nacido en Venezuela, pero residente en los Estados Unidos desde los ocho años, la obra de Luchita Hurtado (1920 – 2020) fue influenciado por diversos estilos, especialmente surrealismo y americano realismo magicotestimonio tanto de sus orígenes como de sus viajes por México y República Dominicana, donde conoció a artistas como Frida Kahlo, Remedios Varo, Leonora Carrington y Rufino Tamayo.
La exposición en Hauser & Wirth incluye obras nunca antes expuestas del artista “piel de cielo» serie. En un comunicado de prensa, la galería explica que “ba partir de mediados de la década de 1970, la mirada de Hurtado se volvió hacia arriba, invirtiendo la perspectiva hacia abajo de sus pinturas anteriores Soy. Una selección de dibujos de transición fusiona estas series, a medida que los elementos del cuerpo femenino, incluidos el pecho, el estómago y la rodilla vistos desde un ángulo descendente, se transforman en montañas ondulantes en una continuación de la experimentación imaginativa del artista con paisajes figurativos. En el Pieles de cielolos cielos de Hurtado a menudo están rodeados de tierra escarpada, en referencia a las montañas de Taos, Nuevo México, donde Hurtado pasaba los veranos, así como a las colinas del Cañón de Santa Mónica, donde la artista residía el resto del año.“
“Estas pinturas que ven a Hurtado mirando hacia arriba reflejan su búsqueda de verdades espirituales”, agrega la galería. “El cambio en esta serie, a raíz de sus trabajos más autorreflexivos ‘I Am’, es hacia una comprensión de la conectividad de todos los seres dentro del mundo y el cosmos, incluidos los humanos, los animales y la naturaleza. Las obras impactantes de esta serie, ‘Gravedad Distante de un Día’ (1977) y ‘El Cordón Umbilical de la Tierra es la Luna’ (1977) personifican la búsqueda de Hurtado del otro mundo, y una contemplación más amplia sobre la vida y la muerte. Estas obras son representaciones de nubes, la luna y el cielo con rocas dentadas y un suelo montañoso envuelto alrededor de los bordes, lo que demuestra una vista desde el interior, como si mirara a través de una cueva, un pasadizo o una tumba. En otros, el cielo se asemeja a la forma de pieles de animales estiradas, lo que da título a la serie.“