El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo el jueves que era esencial que el gobierno de transición de Malí presentara un calendario electoral aceptable que pudiera conducir a la relajación gradual de las sanciones contra la nación de África occidental.
Los socios de Malí en la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (ECOWAS, por sus siglas en inglés) rompieron el domingo los vínculos e impusieron sanciones económicas y políticas más duras a la nación del Sahel por retrasar las elecciones luego de un golpe militar de 2020.
Las sanciones han llevado a una escalada de las tensiones y la retórica entre Malí y sus socios, incluidos Francia y la Unión Europea, que dijo el jueves que impondrá sanciones a Malí en línea con las medidas ya tomadas por la CEDEAO.
Cuando los periodistas le preguntaron si las sanciones podrían empeorar la situación en la región del Sahel de África occidental que lucha contra los ataques de insurgentes vinculados al Estado Islámico y Al Qaeda, Guterres dijo que era una pregunta que le preocupaba mucho.
“Creo que es absolutamente esencial que el gobierno de Malí presente un calendario aceptable desde el punto de vista de las elecciones”, dijo a periodistas en Nueva York.
“Naturalmente, estoy trabajando con ECOWAS y con la Unión Africana para crear las condiciones que permitan al gobierno de Malí adoptar una posición razonable y aceptable para acelerar una transición que ya dura mucho tiempo”, agregó.
Guterres dijo que sostuvo conversaciones el miércoles con los presidentes de Ghana, que preside la CEDEAO, Senegal y Nigeria, y con Moussa Faki, presidente de la Comisión de la Unión Africana, así como con el ministro de Relaciones Exteriores de Argelia.
“Espero poder ponerme en contacto pronto con el gobierno de Malí”, dijo.