Los videos virales vienen en muchas formas: una demostración de sable de luz, una celebración musical de los viernes, un cerdo rescatando a una cabra ahogada. En mayo de 2021, la joven banda de punk Linda Lindas probó la fama en Internet con una interpretación filmada de su canción «Racist, Sexist Boy». “Un niño se me acercó en mi clase y me dijo que su papá le dijo que se mantuviera alejado de los chinos”, explica al principio la baterista de la banda, Mila de la Garza, haciendo referencia a una interacción que ocurrió poco antes de los cierres de Covid. “Después de que le dije que era chino, se alejó de mí”. Me gusta incontable mujeres antes que ellos, los Linda Lindas reivindicaron esta dolorosa experiencia transformándola en una canción punk fangosa. “¡Reconstruimos lo que tú destruyes!” grita la bajista Eloise Wong. Internet se tragó el clip, y todos, desde Thurston Moore hasta Hayley Williams de Paramore, declararon que Linda Lindas era absolutamente genial.
Las Linda Lindas estaban destinadas a la grandeza, de una forma u otra. El cuarteto de Los Ángeles, cuyos miembros tienen entre 11 y 17 años de edad y son asiático-americanos, latinoamericanos o ambos, comenzó como parte de una banda de versiones para niños organizada por Kristin Kontrol de Dum Dum Girls. Los músicos, una mezcla de hermanas, primas y familia elegida, formaron su propia banda. Dentro de un año, estaban abriendo para Bikini Kill, a quien luego cubrieron en la película riot grrrl de Amy Poehler. Moxie. Poco después del lanzamiento de «Racist, Sexist Boy», Linda Lindas firmó con la potencia punk Epitaph. Su álbum debut, Creciendoes potencialmente el disco más conmovedor del año.
las canciones en Creciendo Centrarse en las ansiedades intensificadas por la adolescencia, como la duda, la soledad y la falta de control. Los cuatro miembros, los mencionados Wong y de la Garza junto con Lucía de la Garza (guitarra) y Bela Salazar (guitarra), se dividen las tareas de composición y cada uno expresa sus pensamientos más íntimos con franqueza y precisión. “Si yo fuera invisible/Nadie me juzgaría por/Querer estar solo”, dice un verso desgarrador de la alegre “Magic”. “Pero ya soy invisible/Basta sin la ayuda de nadie más”. Pero incluso cuando la monstruosa inseguridad amenaza con tragarlos, los Linda Linda se anclan en la esperanza de que el mañana se llevará el dolor del hoy. En el programa en español “cuantas Veces”, Salazar lamenta la agonía de sentirse como una extraña pero aterriza en un lugar de aceptación: “Soy diferente/No como todos los demás”, concluye. “Y no todo el mundo/Me entenderá.”