YAKARTA, Indonesia: La agencia antimonopolio de Indonesia multó a Google con 202 mil millones de rupias (12,4 millones de dólares) por participar en prácticas comerciales desleales relacionadas con sus servicios de sistema de pago en Google Play Store.
La decisión sigue a una larga investigación sobre acusaciones de abuso de monopolio.
La investigación, iniciada en 2022, acusó a Google de Alphabet Inc. de explotar su posición dominante al obligar a los desarrolladores de aplicaciones indonesios a utilizar Google Play Billing. Los desarrolladores enfrentaron tarifas significativamente más altas a través de este sistema en comparación con los métodos de pago alternativos o corrieron el riesgo de que sus aplicaciones fueran eliminadas de la plataforma.
Durante una audiencia, el panel concluyó que las acciones de Google violaban las leyes antimonopolio de Indonesia, reduciendo los ingresos de los desarrolladores y la participación de los usuarios. «Google controlaba una cuota de mercado del 93% en una nación con una economía digital de rápido crecimiento», afirmó la agencia, destacando la amplia influencia de la empresa en el mercado de Indonesia de 280 millones de personas.
La investigación reveló que Google cobraba a los desarrolladores hasta un 30% en tarifas a través de su sistema de facturación.
En respuesta, un portavoz de Google dijo que la compañía planea apelar el fallo, afirmando: «Nuestras prácticas actuales fomentan un ecosistema de aplicaciones indonesio saludable y competitivo». La compañía también destacó sus esfuerzos por introducir una opción de facturación alternativa para que los desarrolladores brinden a los usuarios más opciones.
Las prácticas de Google han enfrentado un escrutinio global. Durante la última década, la Unión Europea ha impuesto multas que superan los 8.000 millones de euros (8.300 millones de dólares) al gigante tecnológico por comportamiento anticompetitivo similar en áreas como los servicios de comparación de precios, el sistema operativo Android y la publicidad.
Este fallo subraya el creciente enfoque regulatorio de Indonesia en frenar las prácticas monopolísticas en su mercado digital en rápida expansión.