Aclaremos algo desde el principio. Mucha gente malinterpreta la palabra «autor» y la consideran un testimonio del talento del sujeto como artista. Este no es el caso. Un autor es simplemente alguien cuyas películas pueden identificarse como propias en función de cómo se presenta la película. Las películas de autor pueden ser buenas o malas, pero siempre son distintas de la mente de sus creadores. La esencia mortal del autor es su tarjeta de presentación.
Autores notables incluyen a Yasujirō Ozu, Lars von Trier, Wes Anderson, David Lynch y Quentin Tarantino, pero el tema del tema de hoy es Michael Bay, quien califica absolutamente como autor dadas sus técnicas cinematográficas únicas que, presumiblemente, están diseñadas específicamente para crear disonancia intestinal y enfermedades neurológicas aún por descubrir. Tal es el legado de su transformadores correr, que Paramount Plus a los que los suscriptores se están sometiendo de manera impensable en este momento.
Por FlixPatroleste día 18 de octubre ha visto no uno, ni dos, sino tres diferentes transformadores películas se abren paso con calzador en el ranking de películas de Paramount Plus en el Reino Unido. Definidos al mismo tiempo casi en su totalidad por lo ruidosos e incoherentes que son, Transformers, Transformers: La venganza de los caídos, y Transformers: La oscuridad de la luna Hace tiempo que han pasado a la historia como algunos de los esfuerzos más notoriamente rancios que jamás hayan salido de la máquina de Hollywood.
Bay una vez respondió a sus críticos diciendo que hace películas para adolescentes, tal vez sin darse cuenta de que los adolescentes no se definen por mirar con los ojos a Megan Fox y batallas de robots cínicamente construidas, y de hecho merecen historias que no abandonen su capacidad para emoción genuina o intentar apelar irresponsablemente a los aspectos menos sabrosos de sus identidades masculinas en desarrollo. No culpes tus defectos a los adolescentes, Bay; hazlo mejor.
En todo caso, transformadores Hace tiempo que terminó esa relación tóxica, habiéndose diversificado desde entonces en personas como Abejorrouna historia de origen del Autobot amarillo titular refrescantemente arraigada en una historia sobre la familia y la pertenencia; Transformers: El ascenso de las bestiasuna fusión algo exitosa del alcance de la era de Bay y el Abejorro núcleo emocional que también tomó la loca decisión de iniciar un Universo Cinematográfico de Hasbro que probablemente ya esté muerto en el agua; y transformadores unola primera película de una nueva transformadores continuidad cuya hábil inteligencia narrativa sólo se compara con la seguridad de su identidad como una película de propiedad intelectual popular.
Es este último el que destaca como la auténtica vanguardia del transformadores‘potencial cinematográfico. Sin el gravamen del canon plagado de la Bahía, transformadores uno fue capaz de construir su mundo desde cero, completo con una vibra que era capaz de maravillar, reír, intensidad y angustia. Todo ello, sin dejar de ser totalmente fieles a la esencia de los personajes que han ido ganando adeptos durante generaciones; transformadores unoVerás, entiende que la clave para adaptar las IP populares no está en respetar el canon, sino en respetar historia.
Entonces, si estás en el Reino Unido y planeas hacer cola en Paramount Plus, es mucho mejor que vayas al cine y veas la película que aún se está reproduciendo. transformadores uno en la pantalla grande. Además, la trilogía propuesta para este nuevo canon depende del éxito de taquilla, por lo que también podrás marcar tu buena acción semanal en el proceso.