El funeral de Sven-Göran Eriksson, el primer entrenador extranjero que entrenó a la selección nacional de Inglaterra, se celebró el viernes en la pequeña ciudad sueca de Torsby, donde creció antes de embarcarse en una ilustre carrera en la cima del fútbol europeo.
Eriksson, un entrenador de voz suave pero decidido, guió a equipos en Suecia, Portugal e Italia, ganando importantes trofeos en las décadas de 1980 y 1990 antes de asumir el trabajo en Inglaterra en 2001, dirigiendo a estrellas como David Beckham, quien estuvo entre los asistentes al servicio.
Eriksson anunció en enero que estaba Enfermo terminal de cáncer de páncreas y pasó gran parte de los meses siguientes reconectándose con muchos de los lugares y personas centrales en su carrera antes de morir el mes pasado.
Cumplió su sueño de dirigir al Liverpool, después de liderar al club en un partido benéfico de leyendas contra el Ajax en Anfield en marzo.
El funeral tuvo lugar en Torsby, un pueblo rural de menos de 5.000 habitantes cerca de la frontera con Noruega, y asistieron varios cientos de personas dentro de la iglesia.
Según su agente, en la iglesia neogótica de 1898, unos 200 asientos estaban reservados para su familia, amigos y jugadores de su carrera en el mundo del fútbol. Los asientos restantes estaban abiertos al público, según el deseo de Eriksson.
Otros siguieron el servicio en una pantalla gigante instalada afuera y el funeral recibió una cobertura total por parte de los medios suecos.
El ataúd de madera fue llevado por los portadores del féretro a la iglesia el viernes por la mañana. Junto al féretro había una foto de Eriksson en una mesa pequeña. Entre las coronas de flores había algunas enviadas por la FIFA y la Lazio, el equipo italiano al que Eriksson llevó al título de la Serie A en 2000.
Al funeral también asistió la pareja de muchos años del entrenador sueco, Nancy Dell’Olio.
Los tributos llegaron de primeros ministros, clubes y ex jugadores tras la noticia de su muerte, mientras que los equipos nacionales, incluidos Inglaterra y Suecia, jugaron con brazaletes negros durante el receso internacional de septiembre.
Eriksson, conocido en Suecia simplemente como «Svennis», llevó a Inglaterra a los cuartos de final de los Mundiales de 2002 y 2006, y a la Eurocopa de 2004, dirigiendo una generación dorada de jugadores que, además de Beckham, incluía a estrellas como Frank Lampard, Wayne Rooney y Steven Gerrard.
Comenzó a construir su reputación internacional cuando guió al club sueco IFK Gothenburg a la Copa de la UEFA en 1982 y luego ganó títulos como entrenador del Benfica de Portugal y de los clubes italianos Roma, Fiorentina, Lazio y Sampdoria.
Incapaz de poner fin a la sequía de trofeos de Inglaterra, dejó el mando de la selección nacional en 2006 y pasó a entrenar al Manchester City y al Leicester City, además de a México y Costa de Marfil y a clubes de China y Filipinas.
Información de Associated Press contribuyó a este informe.