Un nuevo informe coeditado por dos grupos de defensa legal con sede en Estados Unidos pide a Irán que ponga fin a una campaña que lleva años de duración para perseguir a los artistas, una iniciativa que se intensificó después de que la muerte de Mahsa Amini bajo custodia policial provocara protestas en todo el país en 2022.
El informe, que fue realizado por el Iniciativa de Libertad Artística (AFI) y Voices Unbound (VU), en asociación con Berkley Law, se centran en el papel del Ministerio de Cultura y Orientación Islámica del país en la creciente supresión de la expresión artística después del levantamiento.
Noble Creo, resisto: artistas iraníes en la primera línea del cambio socialEl informe acusa al gobierno de orquestar un grupo de trabajo en 2022 destinado a apuntar y vigilar a figuras culturales iraníes con plataformas considerables.
AFI y VU pidieron a los gobiernos del exterior que estén atentos a las crecientes necesidades de asilo, ya que muchos artistas perseguidos se han visto obligados a huir del país desde 2022 y otros han sido encarcelados por expresarse disidente.
Un grupo de músicos, cineastas, artistas y escritores fueron considerados amenazas potenciales como parte de la campaña de 2022. El Ministerio de Cultura impuso multas, prohibiciones de viaje y arrestos a más de 140 personas como parte de la campaña. En respuesta, PEN America pidió a la ONU que investigara las detenciones que pudieran ser ilegales.
Entre los iraníes más destacados que huyeron del país como resultado de un proyecto artístico se encuentra el director Mohammad Rasoulof. En mayo, Rasoulof huyó de Irán después de recibir una sentencia de ocho años por producir la película La semilla de la higuera sagradaque ganó un premio del jurado en el Festival de Cine de Cannes. En un discurso en el festival, Rasoulof condenó la campaña de censura y dijo que “el pueblo de Irán está tomado como rehén… No permitan que la República Islámica le haga esto a su propio pueblo”.