TOKIO, 23 ago (Xinhua) — Los precios básicos al consumidor de Japón aumentaron un 2,7 por ciento en julio respecto al año anterior, y el tamaño del incremento se expandió por tercer mes consecutivo debido a los mayores costos de la energía tras el fin de los subsidios gubernamentales, mostraron hoy datos gubernamentales.
El aumento del índice básico de precios al consumidor (IPC) a nivel nacional, excluyendo los alimentos frescos volátiles, siguió a un aumento del 2,6 por ciento en junio, según el Ministerio del Interior y Comunicaciones.
La tasa de inflación se ha mantenido en o por encima del objetivo de inflación del 2 por ciento del Banco de Japón (BOJ) desde abril de 2022, mostraron los datos.
El IPC básico, que excluye tanto los costos de los alimentos frescos como los de la energía y es seguido de cerca por el BOJ como un indicador clave de las tendencias inflacionarias más amplias, aumentó un 1,9 por ciento.
Los precios de la energía avanzaron un 12,0 por ciento, acelerándose desde el 7,7 por ciento del mes anterior, ya que las medidas del gobierno para absorber parte de los crecientes costos de la energía terminaron en junio.
Los costos de la electricidad crecieron un 22,3 por ciento, el mayor aumento desde 1981, cuando el shock del petróleo elevó los precios del combustible, mientras que el precio del gas urbano aumentó un 10,8 por ciento, dijo el ministerio.
El Gobierno decidió recientemente reanudar los subsidios temporalmente a partir de septiembre.
Entre los principales artículos, los precios de los alimentos subieron un 2,6 por ciento, mientras que los de los bienes duraderos aumentaron un 5,2 por ciento debido a la mayor demanda de aparatos de aire acondicionado en medio de temperaturas récord para el mes, según el ministerio.