En resumen
- Más de 10 millones de sudaneses han sido desplazados debido a la guerra en curso, lo que representa el 20% de la población.
- Más de 2,2 millones han huido a otros países, mientras que casi 7,8 millones han buscado refugio en Sudán.
- El conflicto ha agravado una crisis de hambre, y la mitad de la población necesita ayuda humanitaria, convirtiéndola en la mayor crisis de desplazamiento del mundo.
Jartum, Sudán– La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó el martes que más de 10 millones de sudaneses, o el 20% de la población, han sido desplazados desde que comenzó la guerra en abril de 2023. Esta cifra subraya la gravedad de la crisis de desplazamiento en el país del este de África, que ha visto a la mitad de sus aproximadamente 50 millones de habitantes enfrentarse al hambre y necesitar ayuda humanitaria.
Desde que estalló el conflicto entre el ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) paramilitares en la capital, Jartum, se ha extendido rápidamente por Darfur y otras regiones. Las RSF han tomado el control de la mayoría de los centros de Darfur, donde el hambre se ha convertido en la principal causa de la migración.
Según el informe bimestral de la OIM, más de 2,2 millones de personas han huido a países vecinos y casi 7,8 millones han buscado refugio en Sudán. Además, 2,8 millones de personas ya habían sido desplazadas por conflictos anteriores.
El Dr. Shible Sahbani, director de la Organización Mundial de la Salud en Darfur, destacó que el hambre, más que la violencia, es ahora la principal causa del desplazamiento de Darfur. Durante una visita a los refugiados en Chad, el Dr. Sahbani contó historias de personas que huyeron porque los combatientes se habían llevado todos los alimentos producidos localmente.
En las últimas semanas, las actividades de la RSF en el sureste han desplazado a más de 150.000 personas del estado de Sennar, muchas de las cuales han sido desplazadas varias veces debido a las incursiones de la RSF. El estado de Gedaref, que actualmente alberga a 668.000 personas, se enfrenta a los desafíos de las fuertes lluvias y la escasez de refugios, y las incursiones de la RSF complican aún más la situación.
Human Rights Watch advirtió la semana pasada sobre la expansión de RSF en Gedaref, lo que plantea riesgos adicionales para los 40.000 refugiados etíopes, principalmente tigrayanos, a quienes RSF acusa de apoyar al ejército sudanés.